Al respecto señaló Miguel Monserrat, delegado de Asisa en
Balears, que, tras romper con Policlínica Miramar, «se pidió a los
médicos, a través de burofax, que nos dijeran dónde querían pasar
sus consultas como consecuencia del cierre de actividad con
Policlínica. Las respuestas fueron diversas, pero de los 84 médicos
afectados, 46 siguen con Asisa, incluyendo 26 que mantendrán su
consulta en la propia Policlínica, en el edificio anexo. Es decir,
38 bajas de un total de 769 que van a seguir en Asisa el año que
viene». Pese a la alarma creada entre asegurados de Asisa,
Monserrat asegura que nadie quedará desasistido, «porque no hay
ninguna duda de que las cinco clínicas que colaboran con Asisa, la
nueva Palmaplanas, la renovada Juaneda o la impresionante actual
Clínica Rotger, así como la Femenía y el Hospital General de Muro,
todas ellas con una calidad excepcional, van a atender a nuestros
asegurados como siempre se han merecido».
Frente a los rumores de quiebra de Asisa que circulan entre
algunas aseguradoras, Monserrat afirma que «para intentar trasvases
de pólizas se propagan infundios como el de la quiebra, algo
totalmente falso».
Asisa cuenta en la actualidad con 1.500.000 asegurados (42.600
en Balears), tiene en propiedad 17 clínicas y genera unos ingresos
anuales de 600 millones de euros.
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