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TONI LIMONGI / JOSEP M. AGUILÓ
La campaña de información sobre el traslado de la estación del tren de Inca desde la Plaça d'Espanya a la calle Jacint Verdaguer, impulsada desde la Conselleria d'Obres Públiques, Habitatge i Transports del Govern y el Ajuntament de Palma, prosiguió ayer de forma ya personalizada.

Un equipo integrado por ocho personas comenzó a repartir en la estación de la Plaça d'Espanya y en la parada de Son Oliva centenares de folletos, en los que se daba cuenta de que «desde el día 17 de agosto y mientras duren las obras de construcción de la nueva Estación Intermodal, la estación de tren se trasladará a la calle Jacint Verdaguer, números 1-3».

Susana Blanquer y Samuel Valero son dos de los trabajadores de esta campaña, que lleva el título genérico de 'Sortim'. «Nos repartimos en turnos de dos personas, desde las 07.30 hasta las 21.30 horas. Hoy por la mañana hemos entregado unos dos mil folletos en la Plaça d'Espanya y más de mil en Son Oliva. Hay más de 12.000 impresos por repartir», dijo Blanquer. Valero comentaba que habían encontrado gente más informada y otra menos. «Muchas personas, por ejemplo, no han cogido el folleto porque ya lo tenían, ya que también se reparte en las taquillas», señaló.

Laura Riudala es la coordinadora de la campaña. «Desde el 6 de junio, un equipo de seis personas ha estado informando puntualmente sobre las obras. Hemos ido casa por casa, recogiendo y anotando las denuncias de los ciudadanos. Ahora hemos incrementado el equipo a ocho personas, en distintos turnos. Estaremos, a partir de hoy, disponibles en las estaciones de Son Oliva -que cerrará-, Jacint Verdaguer y Plaça d'Espanya», dijo.

Reyes Peña y Jacobo Solís, cogieron un folleto. «Lo que no entiendo es que hagan una estación intermodal para transporte cuando lo que falta es precisamente eso, el trasporte. Es un poco raro. No es que sea muy coherente», aseguró Peña. Solís señaló que «por otra parte, no está mal que el Govern informe al ciudadano del cambio de estación».

Carlos Peñas, residente en Marratxí, indicó que no sabía nada. «No tenía ni idea de este cambio. ¿Dónde está Jacint Verdaguer? ¿Detrás de la estación de autobuses?», preguntó. Por su parte, Magdalena Ferragut, residente en Inca, dijo que no quería saber nada de lo que pasa en Palma, «ya nos basta con lo que nos hacen en Inca. Una barbaridad».

Por último, Rolando Coronel se mostró un poco más comprensivo. «¡Qué le vamos a hacer! Habrá que resignarse a las obras. Yo recomendaría que se den prisa, que las obras se hagan rápido y que no se enreden», resumió.

A partir de hoy, también serán utilizadas por vez primera las vías provisionales que se han instalado en las últimas semanas en la zona. Por otra parte, para permitir que los peatones puedan atravesar las vías provisionales será habilitada una pasarela elevada que unirá las calles Jordi Andreu Alcover y Sant Vicenç Ferrer.

Fuentes de la Conselleria d'Obres Públiques pidieron ayer disculpas a los usuarios del tren y a los vecinos de la zona «por las molestias que pueda provocar el cambio de estación».

Críticas
Por otra parte, la edil de EU-EV en el Ajuntament Marisol Fernández denunció ayer que a partir de hoy «cada día cerca de 500 personas, trabajadores y estudiantes mayoritariamente, se quedarán sin servicio ferroviario en Son Oliva debido a la desaparición de su parada, y tendrán que 'buscarse la vida' durante dos años, pues no está prevista la construcción de otra parada provisional allí».

Fernández añadió que «las mujeres serán las más perjudicadas por esta falta de servicio en Son Oliva y Son Fortesa, ya que del total de usuarios del tren, un 60 por cien son mujeres».

Por último, la Plataforma pel Parc de les Vies emitió ayer un comunicado en el que señala que el Pla de Mobilitat del Ajuntament «está obsoleto» y en donde reitera su petición de que se cree un bulevar peatonal en el centro de la calle Jacint Verdaguer.