Un año después de que Chenoa comenzara a trabajar en su presente
álbum, la mallorquina nos presenta «Nada es igual». Lo hace esta
misma tarde en el centro de Carrefour del Coll den Rabassa, en una
firma de discos para todos sus seguidores. Ayer, estaba rebosante
de felicidad. Levantando la copa. Y es que le acababan de comunicar
su ascenso atop ten de la lista nacional de ventas. Sin duda, un
gran mérito para una cantante en nuestro país.
-¿Qué tal?
-Muy bien. Llevamos dos meses muy heavies, trabajando a tope.
-¿Satisfecha?
-Mucho. Creo que ha sido el disco que más planificado y elaborado
que he hecho. Los demás han sido un poco deprisa. Bueno que te voy
a decir, mejor que tú, que me has seguido nadie lo sabe, pero bueno
la cara dulce de esto es que podía escribir canciones. Ya era hora,
y eso me ha gustado.
-Cinco de las once canciones son suyas, ¿veremos un cambio
radical en Chenoa?
-No, es pequeño. Más que cambio es una evolución. El repertorio
ha sido lo que buscamos de alguna manera. Coherente, una línea que
fuera lo que yo quería hacer como pequeño cambio.
-¿La inspiración le llega cuando el corazón está triste?
-No. Yo creo que los angelitos de la inspiración te llegan en
cualquier momento. Hay canciones que se tarda bastante en escribir.
«Nada es igual» me costó bastante.
-¿En qué momento la escribió?
-«Nada es igual» la escribí en pleno acoso mediático, te lo digo, y
fue un momento en el que yo intentaba ser un poco consecuente, con
lo que estaba sucediendo. Yo siempre he dicho que jamás hablo de mi
vida personal y creo que eso no es faltarle el respeto a nadie. Es
una opción que todo ser humano tiene al igual que el periodista
tiene derecho a preguntar. La libertad absoluta de preguntar no hay
que quitársela a nadie.
Julián Aguirre
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