Joyas del mar

Y es que este trofeo, impulsado por don Juan de Borbón con el propósito de incentivar la salvaguarda del patrimonio histórico marítimo y recuperar la presencia del pabellón español en el mar, cuenta además con un amplio programa de actos, como complemento a la competición que se iniciará mañana, con la primera regata y que este año girará en torno a la presentación oficial del Hispania, el barco del rey Alfonso XIII, cuya ardua recuperación en la que han participado activamente los Astilleros de Mallorca, inspiró la creación de la fundación que lleva su nombre y organiza desde sus orígenes la regata.

En el día de ayer los visitantes al 'village', que recibía los últimos toques, ya pudieron disfrutar de la imagen de algunos de los veleros clásicos españoles que tomarán parte, como el Giralda y el restaurado Giraldilla, que pronto izarán sus velas junto a colosos como la goleta Creole y el Mariette o el Mariquita, que por vez primera competirán a la vez junto a otros yawls, balandros, queches, sloops o cuters, cuya botadura se remonta en muchos casos a los principios del siglo XX e incluso del XIX.

Son todos ellos producto artesanal de célebres diseñadores o carpinteros de ribera que aplicaron toda su experiencia secular en su construcción. Circunstancia que exige una particular pericia e intuición por parte de sus dotaciones a la hora de maniobrar, al carecer de elementos electrónicos o asistidos.

Todo barco construido antes de 1949 o que sea una reproducción fiel a un plano anterior a dicha fecha está considerado como una embarcación de época y por tanto con derecho a participar. Asimismo, también se establece la categoría de 'Barcos Clásicos', botados entre 1950 y 1975, o con 'Espíritu de Tradición', en función de sus velas y aparejo, que se dividen en varias clases.

Todo un espectáculo marítimo que hasta el próximo día 19 podrá ser observado en vivo y en directo y a toda vela desde las golondrinas patrocinadas por Ultima Hora.

Gabriel Alomar