Ni el propio Sebastián Victory se imaginaba que en apenas diez años, su Trofeo de Baile Deportivo pasara de las 30 parejas a las 116, que fueron las que participaron en la edición de ayer, en el polideportivo del colegio de La Salle. Lo cierto es que en nueve años se ha cuatriplicado la paticipación. Lo cual no está nada mal. «Y eso es lo que nos anima a seguir», apunta Victory.
Este trofeo, que contó con el apoyo de Govern, Consell de Mallorca y Ajuntament de Palma, además de una serie de firmas comerciales, dio comienzo ayer a mediodía y se prolongó hasta pasadas las ocho de la tarde-noche, con unas 800 personas en las gradas dando ánimos a sus más allegados. Poco antes de que se abrieran las puertas, era tal la concentración de participantes, algunos/as con el pelo engominado y maquillaje en sus rostros, portando sus bolsas que contenían los equipos de baile, que aquello se semejaba más a la cola de un casting de OT, o de GH, que a otra cosa, llamando la atención la variedad de bailarines que reunió. El más joven apenas habría sobrepasado los cinco años de edad y el más veterano estaría algo por encima de los 60. «Aunque este trofeo está abierto a todos los bailarines de cualquier lugar de España -nos dijo Victory- todas las parejas que participan hoy son de Balears, excepto una, que ha llegado de Galicia. En cuanto a los jueces, cuatro son de Catalunya y uno de Valencia».
Los bailarines, según dictan las normas, quedaron distribuidos de acuerdo a categorías de baile y por grupos de edad. De las primeras hay siete, F (la más elemental), E, D, C, B, A y S ( la superior), mientras que los grupos de edad englobaron a juveniles ( junior 1 y junior 2), jout, o jóvenes, adultos ( 1 y 2) y seniors (1, 2 y3).
Latinos y standars
Para entender un poco este pequeño galimatías, un bailarín puede ser, de acuerdo a su edad, juvenil-junior 1 y estar en la categoría E. O ser adulto 1 y estar en la categoría B. Pasar de una categoría a otra depende del progreso que tenga.
En cuanto a los estilos o formas de baile, quedaron englobados en standard, que a su vez engloban a vals inglés, vienés, slow fox, quick step y tango, y en latinos, que se dividen en samba, cha-cha-cha, rumba-bolero, pasodoble y jive.
¿Los más espectaculares? Depende del gusto de cada cual, pero, en opinión de un profano en la materia, como quien suscribe, podrían ser el jive, que es una especie de rock, al igual que la rumba-bolero, sin olvidarnos de pasodoble, que en la modalidad de baile deportivo nada tiene que ver con los pasos del pasodoble tradicional. Eso en cuanto se refiere a los bailes de modalidad latinos, que en categoría Standard los más vistosos podrían ser el vals vienés, por su elegancia, y el quick step, por esos saltitos que se dan en momentos determinados.
Pedro Prieto
Foto: Nuria Rincón
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