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Scandinavian Airlines System (SAS) ha dado por concluido el proceso de venta de Spanair, al considerar que las ofertas presentadas «no reflejan el valor intrínseco» de la compañía española, según informó ayer la aerolínea escandinava en un comunicado.

En concreto, SAS anunció que renuncia a la venta de Spanair debido a las «adversas condiciones del mercado de la aviación en España, a los altos precios del combustible y a la presión del sector financiero», además de por el hecho de que «no ha podido alcanzar un acuerdo en los términos y condiciones que se había propuesto».

La empresa sueca informó que su objetivo principal consiste ahora en que Spanair entre en beneficios, aunque la compañía no ha informado sobre las medidas que tomará para recuperar la rentabilidad.

Como se recordará, Spanair registró en el primer trimestre de este año unas pérdidas después de impuestos de 382 millones de coronas suecas (40'8 millones de euros), una cifra similar a la registrada en el mismo trimestre del año anterior, cuando obtuvo un saldo negativo de 379 millones de coronas suecas (40'4 millones de euros).

La Conselleria de Mobilitat i Ordenació del Territori se felicitó ayer de la decisión de SAS porque «garantiza que la sede y la base de la compañía permanecerán en el aeropuerto de Palma».

El Govern afirmó que intensificará los contactos con SAS para estar informados sobre el proceso de reestructuración de la aerolínea mallorquina y ofrecer su colaboración en ese proceso.