La nueva serie de producción propia de IB3, Llàgrimes de Sang, inició su grabación en Menorca. La jornada de ayer empezó en el cementerio de Maó y por la tarde, el equipo se desplazó a la estación marítima de Ciutadella.
Llàgrimes de Sang llegará a la pequeña pantalla en setiembre, con la próxima temporada televisiva 2008-2009. La duración de la serie es de doscientos capítulos y se emitirá de forma diaria a las 21.15 de la noche, respetando la misma franja horaria de su predecesora, Laberint de Passions.
El motivo de iniciar el melodrama en Menorca responde a dos hechos. Por un lado, para ser realistas con la ficción ya que una de las protagonistas deja la Isla para trasladarse a Mallorca para conocer a su hermana. Y por el otro lado, ya se han rodado tres series en la capital balear y ésta es una manera de que «todos los espectadores de las Islas se sientan identificados y refleje un sentimiento común», comenta el director de la serie, Humberto Miró, quien ya ha dirigido otras producciones del canal autonómico.
Lo que puede saberse hasta el momento es una breve sinopsis cargada de sorpresas. Una familia acomodada de Mallorca relacionada con el mundo vinícola balear, Bodegas Pons, se verá alterada por la llegada de una mujer menorquina, Alba Sintes (Queralt Albinyana). Laura Pons (Lluqui Herrero) vivirá una sacudida emocional al recibir la noticia de que tiene una hermana melliza. A este ajetreo familiar, se añade la aparición de un vino misterioso procedente de una uva desaparecida cien años atrás. Esta investigación servirá de excusa para hacer un recorrido por la historia del siglo XX de Mallorca.
El equipo de Llàgrimes de Sang lleva años trabajando conjuntamente, lo cual dice mucho de la buena coordinación. Y es que para que las diez horas de media de rodaje lleguen con éxito al público, es esencial que el trabajo detrás de la cámara sea agradable y «familiar».
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