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J.RIERA
El presidente Francesc Antich expresó su malestar con las declaraciones de la secretaria general del PP, María Dolores Cospedal, cuando afirmó que a principios de la semana que viene el nuevo sistema de financiación «puede hipotecar a las generaciones futuras». Antich también se mostró molesto con el PP balear por pedir la dimisión del alcalde de Capdepera, Bartomeu Alzina.

Antich expresó su descontento con Cospedal ya que el PP «siempre se ha opuesto al avance de las autonomías y a una financiación que les permita mejorar la calidad de vida de los ciudadanos». El presidente indicó que «las autonomías son fundamentales para el mantenimiento del estado del bienestar, y la experiencia de las últimas décadas así lo demuestra». «A medida que han ido avanzando los autogobiernos en coordinación con el gobierno central, las condiciones de vida de la gente han mejorado», dijo Antich.

El president considera que, por lo que respecta a Balears, «nos encontramos en un momento muy importante de cara a conseguir una nueva financiación que haga posible atender las demandas de los ciudadanos». Antich se preguntó «qué debe pensar el PP balear de estas declaraciones, que pueden perjudicar a nuestra autonomía». El president se mostró de acuerdo con Emilio Pérez Touriño, el presidente de la Xunta de Galicia, cuando dijo que las comunidades bilingües necesitan una mejor financiación.

El president Antich dio a conocer el pasado martes que la nueva financiación entrará en vigor a partir del próximo 1 de enero, es decir, tendrá carácter retroactivo. Además, Antich también dio a conocer que se reunirá con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en breve para hablar sobre el nuevo modelo. También confirmó que se tendrá en cuenta la población real de Balears, una de las principales reivindicaciones del Govern.

Por otra parte, Antich consideró una postura «cínica» la petición de dimisión del alcalde de Capdepera, Bartomeu Alzina, que el PP de Balears ha hecho por el derrumbe del Hotel Son Moll. «El Partido Popular tiene mucho que callar en materia urbanística. Y todos los problemas que está atravesando debería hacerlos más prudentes. Han muerto cuatro trabajadores, deberían ser más responsables».