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«Ojalá todo el mundo pudiera vivir bien y vivir en paz». Mahfouz Abumahfouz expresa ese deseo de forma concreta para su país: Palestina. El presidente de la Asociación de Inmigrantes de Medio Oriente, lleva cinco años viviendo en España, primero en Canarias y luego en Mallorca. Sus padres y el resto de su familia forman parte de los miles de palestinos que se instalaron en Jordania a raíz de la fundación de Israel en 1948. Tanto él como los suyos viven con preocupación y enorme apasionamiento lo que ocurre en Gaza desde que hace una semana el gobierno de Tel Aviv comenzó los bombardeos sobre el territorio palestino.

«La gente está muy indignada con lo que ocurre. Hay padres que esperan a que sus hijos vuelvan del trabajo y éstos no vuelven a casa. Niños que viven asustados por los bombardeos y que no duermen por las noches», asegura. Mahfouz explica que las condiciones en las que se vive en Gaza son dramáticas desde hace meses: «Hay un millón y medio de personas encerradas allí, no pueden salir y no tienen derecho a nada. Es una cárcel en grande y sin gasto, porque en una prisión de verdad hay que gastar en alimentos e incluso los presos tienen derechos». Ante esa situación, comprende que los palestinos respondan ante las acciones de Israel. «¿Qué te espera si no? La gente en Palestina no tiene nada y los judíos tienen las mejores armas de Oriente Medio».

Además enumera agresiones como el cierre de fronteras, las detenciones o el bloqueo económico. De hecho, aunque asegura que discrepa en muchos puntos con Hamas se pregunta: «¿Qué se supone que van a hacer cuando Israel mata a sus padres o hermanos?». Mahfouz carga toda la culpa del conflicto en la creación del estado de Israel: «En 1948 los judíos sólo eran el veinte por ciento de la población de Palestina», recuerda y cuestiona que se pueda crear una nación en un territorio en el que ya vive un pueblo: «No tienes derecho a quitar a nadie un país para tí. Para muchos judíos no existe Palestina; para mí no existe Israel».

Cada día, el presidente de la asociación, cuenta que recibe muestras de apoyo en España: «La gente es amable y la mayoría y los que conocen bien la historia están con los palestinos». Por ejemplo, Mahfouz cuenta que una mujer que le conoce estuvo tres días buscándole para saber cómo estaban sus familiares. En general resume la actitud que nota hacia el conflicto en Mallorca de una manera gráfica: «Cualquier persona lo primero que dice es 'por qué'».

En España, Mahfouz ha trabajado en distintos mercados y llegó a tener una tienda propia. Aquí vive con su mujer y sus hijas que aún son pequeñas; la mayor tiene tres años. «Aún no tienen edad como para saber lo que pasa, pero sí que les hablo de Palestina. Si pudiera les daría a mamar Palestina», asegura. Esa pasión por su pueblo es la que, según afirma, hará que su causa siga en marcha. «Nunca va a terminar, por mucho que pase, no van a acabar con Palestina. O son capaces de volver atrás mil años o no lo conseguirán», dice. Además de él, en Mallorca vive un grupo reducido de inmigrantes palestinos, que se agrupan en la asociación de Oriente Medio.

Precisamente hoy viernes, a las siete de la tarde en la plaza de España, la asociación que preside Mahfouz junto con otras quince organizaciones convocan una manifestación unitaria bajo el lema: 'Paremos la masacre del pueblo palestino'. Los convocantes, entre los que hay varias organizaciones inmigrantes y partidos políticos como Esquerra Unida y el PSM, mostrarán su solidaridad con Gaza, además de pedir que se paren de forma inmediata los ataques contra el territorio autónomo. Además, piden a partidos políticos, sindicatos, asociaciones cívicas y a la ciudadanía que se una a la condena y que «todos nos movilicemos para conseguir una solución justa para el pueblo palestino en un conflicto que ya dura demasiados años».

En el manifiesto que acompaña a la concentración solicitan a todas las instituciones que condenen la actuación de Israel y que presionen con las medidas diplomáticas, económicas y comerciales para que paren los ataques. En concreto piden que se suspendan los acuerdos entre la Unión Europea e Israel. Junto a la movilización de hoy las organizaciones han iniciado una recogida de firmas en apoyo a la causa palestina.