La Nochevieja, caso del hotel Valparaíso, motivó un alza de la ocupación hotelera. | ultimahora.es

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La planta hotelera urbana de Palma registró en diciembre uno de sus peores índices en materia de ocupación hotelera, puesto que no superó el 20%, mientras que la planta de alojamiento turística abierta en la Platja de Palma y en Calviá salvó el mes gracias al turismo de vacaciones de la tercera edad del Imserso, que propició ocupaciones de entre un 40 y 45%, según señala la presidenta de la Federación Hotelera de Mallorca (FEHM), Marilén Pol.

«El bajón espectacular de la ocupación en los hoteles de Palma se ha debido a la caída del negocio corporativo de empresas y grupos. A esto hay que sumar el impacto negativo que tuvo la huelga de controladores en el Puente de la Inmaculada y, cómo no, también por la crisis económica que afecta a nuestro país», apunta Pol.

Impacto negativo

La presidenta de la FEHM explica que «todo este cúmulo de circunstancias se ha cebado con la hoteleria urbana, haciendo mucho más difícil todavía su propia operativad en un mes muy complejo como es diciembre. Sin duda alguna, ha sido uno de los peores diciembres de los últimos años, puesto que los volúmenes de negocio no han podido cubrir los gastos fijos de las empresas. Los dos únicos días en que hubo buena ocupación fueron el día 31 de diciembre y 1 de enero, donde se llegó al 75%, el resto de los días de diciembre no se llegó al 20%».

En cuanto al Imserso, Pol puntualiza que sin este tipo de turismo «sería materialmente imposible poder mantener en activo los hoteles de Platja de Palma y Calvià, lo cual indice, una vez más, en lo complicado que es lograr incrementar la cifra de turistas en los hoteles de Malorca en los meses invernales».