En Madrid es más complicado porque allí la caverna ruge mucho, pero al fin y al cabo son las mismas habas y los mismos números. Y si Susana Díaz (que aspiraba a la silla de Sánchez) protesta, el secretario general del PSOE tiene suficientes recursos para moverle tensión interna con los secretarios provinciales socialistas desde Huelva a Almería. Armengol también tiene mucha experiencia en trifulcas internas. Aina Calvo ha sido durante mucho tiempo su Susana doméstica y ya se vio en su momento que supo devolverla a los toriles con la lengua fuera.
Sánchez no se desvía ni un milímetro de la estrategia que sin duda ha analizado con Armengol. Aquí, en un segundo plano y en la sombra, también juegan su difuminado pero importante papel los asesores de más confianza de Francina, como son Cosme Bonet y Pere Joan Pons, entre otros. La estrategia es nítida, tanto que mantiene desorientada a la caverna del Manzanares. Primero dejar que el Rey designe aspirante al calcinado Mariano Rajoy. Después, fiesta torera en el Congreso. Sin diputados suficientes, Mariano va a tragar Bárcenas a dos carrillos. Quedará descartado. La caverna reaccionará exigiendo un Gobierno de concentración PP-PSOE-C,s presidido por un nuevo candidato del PP (ya lo están buscando). Pero Sánchez no picará y Felipe VI deberá proponerle como presidente.
Y ahí viene la jugada: la izquierda en su conjunto suma 161 diputados y el PNV 6. A ello hay que sumar los 17 escaños de los catalanes, que en el Principado están unidos en Junts pel Sí. En última instancia, Sánchez podría obtener, al menos 167 votos a favor de la izquierda y vascos y la abstención catalana. Hay que recordar que Aznar tenía menos escaños propios en 1996 y que en 1977 Adolfo Suárez obtuvo 168. Los números cuadran. Sánchez podría formar gobierno con sus 90 escaños más los dos de IU y los 6 del PNV con apoyo externo de Podemos y Junts pel Sí absteniéndose y negociando una solución dialogada. Y todos con la mirada puesta en la reforma de la Constitución. Y, sobre todo, canalizando los anhelos de cambio de una mayoría social expresada en votos.
La receta Armengol es la única que cuadra. Sánchez va de cabeza hacia este objetivo, por muchas presiones que tenga que soportar, desde carrozones como Felipe González a un poderío mediático madrileño que no puede controlar el desarrollo de los acontecimientos. Si esta estrategia sale adelante, ¿cuál será el peso de Francina en la dirección del PSOE? Seguramente, muy importante. Tal vez de primerísimo orden.
10 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
"desde carrozones como Felipe González"... Un periodismo muy profesional sí señores. Instrumentalización al poder.
Pues ser "socio" de Podemos implica tener dos oposiciones: la del partido en la oposición y la rémora de quienes son tus propios compañeros. Podemos quiere imponer su programa a quien sea, a propios y extraños. No dejará las manos libres a Sanchez, le exigirá haga las cosas como ellos quieren. Tras la investidura que eso sí se puede conseguir, van a tratar de imponerse como puedan. O como el perro del hortelano, ni comerán ni dejarán comer. Lo que pasa es que a Sanchez le atrae lo de ser presidente. Y después ya veremos. Malos socios se buscará. Lo tendrán cogido.
El problrma de este Señor, es que está engañando a sus socios, si es que al final le apoyan. Para reformar la Constitución, necesita el apoyo de las 3/5 partes de Congreso, es decir, 234 votos a favor. ¿De dónde los va a sacar sin apoyo del PP o Cs?. Esto va terminar muy mal. Todos a leches entre ellos. Ya veremos...
A poco que Pedro Sanchez sea un poco riguroso y evalúe como le va al PSIB en Baleares, debería olvidarse de la formula, porque llegara al gobierno pero hará desaparecer al PSOE. Aquí ya van por la tercera o cuarta fuerza los socialistas y forzar pactos contra-natura después de insultarse, menospreciarse e ignorarse no pasa desapercibidos por los ciudadanos, que ademas no soportan a las arribistas,
QUE DEU ENS AGAFI CONFESSATS.....
Allò que no quadra, senyor Riera, és que un partit que es té per demòcrata i progressista -PSOE- no pacti referèndum amb les forces polítiques de Junta pel Sí.
Armengol le ha enseñado los números del PSOE en las siguientes elecciones a hacer esta colección y le ha dicho: "Sólo hemos bajado al cuarto lugar, es un chollo" y Sánchez debe de haber dado esos números por buenos. Y cuando el periodista da a entender que si pactan con quien a él no le gustaría dice que sería una estafa para el electorado, supongo que estará pensando que todos los votantes del PSOE de Andalucía y otros sitios, curiosamente donde más votos ha sacado el PSOE, estarían encantados con que el PSOE pactara con independentistas, vamos justo lo que dice su dirigente, la que él llama Sultana, para ridiculizarla. Muy demócrata el peridista, sí señor.
El peor escenario posible
Pablo Iglesias no terminará el año siendo presidente del PSOE, y detrás de él, le seguirá Francina 17%. Al tiempo, ya lo escribirás algún día.
Con lo cual queda todo dicho de la deriva socialista y su incapacidad.