En agosto de 2017, la considerada última corrida de toros en la plaza de Palma, la imagen de la hija de la infanta Elena, que en ese momento tenía 16 años, encendió la polémica. | M. Joy

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Esquerra Unida Mallorca ha exigido a las administraciones de Palma, Inca, Muro y Alcúdia que se sancione a los empresarios taurinos por permitir la entrada de menores en las corridas de toros celebradas el verano pasado.

La formación ha recordado en un comunicado que «la entrada de menores en las corridas está prohibida por ley y que año tras años los empresarios taurinos burlan la legalidad sin apenas consecuencias».

El portavoz de EU Mallorca, Guillermo Amengual, ha lamentado que «en el caso de los ayuntamientos de Alcúdia y Muro se hace la vista gorda a las ilegalidades cometidas por los empresarios taurinos, ya que estos son defensores de la tortura y muerte por diversión y apenas sancionan a sus socios de espectáculos sangrientos».

En el caso de Palma e Inca, Amengual espera que desde los consistorios «se imponga la máxima sanción posible».

En esta línea, el portavoz ha pedido al Ayuntamiento de Muro que «imponga una sanción ejemplar» a un empresario taurino de la localidad «por los graves altercados de desorden público en la última corrida de toros, donde los espectadores lanzaron en pleno festejo taurino botellas, latas y garrafas de agua a los toreros porque estos se negaban a torear al no haber cobrado por el festejo», ha explicado.

«Basta ya de impunidad a los empresarios taurinos de Mallorca», ha reclamado Amengual, quien ha añadido que «cada año se repite la misma historia en las corridas de toros de la isla ante la pasividad o corrupción de ciertos ayuntamientos que gastan dinero público, algo también prohibido por ley, en entradas para las corridas de toros».