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El magistrado de Instrucción número 12 de Palma, Manuel Penalva, ha denunciado este jueves la desprotección de quienes colaboran con la Justicia con su testimonio en algunas causas: «Nuestro sistema no protege suficientemente a los testigos protegidos, creo que no los protege en absoluto».

En una entrevista en el programa «Hoy por hoy» de la Cadena Ser, Penalva, que hace un mes fue recusado de la instrucción del llamado caso Policía Local por pérdida de apariencia de imparcialidad por insultar a unos investigados, ha denunciado que tanto los investigadores como los testigos del caso han sufrido hostigamiento.

«A mi modo de ver nuestro sistema no protege suficientemente a los testigos protegidos, eufemísticamente. Creo que no los protege en absoluto», ha afirmado y ha insistido que «no tienen la protección de las instituciones ni tienen la posibilidad por ejemplo de portar un arma», como sí ocurre con los investigadores y como ha sido su caso durante la instrucción de esta causa sobre una presunta trama policial para beneficiar a determinados empresarios.

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«En mi caso incendiaron un coche, aunque se equivocaron de vehículo y han dejado pistolas pintadas en mi casa. El fiscal es el que más lo ha sufrido, también porque ha estado más tiempo en la causa, y han sido constantes los allanamientos en sus dos domicilios, ha sido seguido y perseguido, a veces de manera sutil», ha indicado.

Penalva ha detallado que «a veces no son hechos denunciables, son miradas y actuaciones, conductas que provocan una intimidación». Sobre si ha llegado a temer por su vida ha respondido: «No sabría qué contestar, no me considero una persona miedosa, me he sentido a veces inquieto y preocupado, sobre todo por mi familia y porque no sé de qué son capaces esta gente».

«Esta campaña de amenazas e intimidación, principalmente contra testigos e investigadores, no sabemos en qué puede acabar, y no necesariamente porque vayan a mandar dos matones a pegarnos un tiro, como ha ocurrido en Tenerife con un testigo, sino porque creo que a ellos mismos se les puede escapar de las manos», ha afirmado.

Sobre la puesta en libertad del empresario Bartolomé Cursach, después de que la Audiencia de Palma fijara para él una fianza de 1 millón de euros y le retirara el pasaporte, Penalva ha afirmado que «si hay riesgo de fuga es interpretable, la Audiencia ha considerado que está suficientemente mitigado, y hay que respetarlo».
«Aquí el principal problema es la presión que siguen ejerciendo sobre los testigos y la lectura que se puede hacer de ello», ha añadido.