La proximidad a la zona del Nou Llevant ha generado un trasvase de la inversión sueca a las viviendas más próximas del barrio de la Soledad. Con el paso del tiempo, según los promotores inmobiliarios, el cambio en la zona será sustancial. | Teresa Ayuga

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La inversión inmobiliaria sueca en Palma, que desde 2013 ha crecido más de un cien por cien, se diversifica más allá de Santa Catalina y el Casc Antic, zonas que hasta la fecha han captado la atención de este mercado para tener una vivienda en propiedad en la Isla. Así, en el último año se han cerrado operaciones de compraventa en La Soledad, Son Espanyolet y Pere Garau.

Promotores inmobiliarios coinciden en señalar que Santa Catalina y el Casc Antic han quedado saturados por la presión que realizan desde hace cinco años las agencias inmobiliarias suecas radicadas en Mallorca, que realizan todo tipo de ofertas a propietarios de pisos para incluirlos en su cartera de negocio y poder comercializarlos luego en Suecia.

Interés inversor

«La Soledad es uno de los puntos donde los suecos están comenzando a comprar casas, al ser puestos al corriente de que el barrio de Nou Llevant se convertirá con el paso de los años en la zona de crecimiento urbanístico de lujo de Palma, tanto en lo que respecta a usos residenciales, de servicios y turísticos», indica un promotor inmobiliario de la Isla que conoce a la perfección el mercado sueco.

Los precios de mercado son muy diferentes a los que imperan en Sant Catalina, Casc Antic y enclaves del litoral del municipio de Calvià: «La comercialización en estos momentos está a precio de mercado, pero lejos de los 350.000 euros que se han pagado hasta la fecha. En La Soledad son muy inferiores y se venden enseguida los pisos por las ofertas que hacen los compradores e inmobiliarias a sus propietarios. Lo mismo sucede en la barriada de Son Espanyolet e incluso en plena Plaça Pere Garau, lo cual sorprende y da una idea del interés que hay por contar con una vivienda en Palma. Ha habido un cambio sustancial y no hace más que resaltar que Mallorca está mas de moda que nunca en Suecia».

Las mismas fuentes inmobiliarias afirman que a corto y medio plazo «se va a producir otro desembarco de nórdicos por el incremento de la conectividad aérea desde Escandinavia a Mallorca. Hay demanda y las compañías aéreas, caso de SAS o Norwegian, han vuelto a programar vuelos directos desde las principales ciudades nórdicas a Palma, principalmente desde Estocolmo, en verano e invierno». A esto hay que sumar los reportajes en los principales medios de comunicación suecos, que resaltan las mejoras habidas en la ciudad de Palma a nivel urbanístico, hotelero, comercial, de restauración y oferta complementaria.

Otro factor que influye positivamente son los precios tan competitivos que imperan en el mercado inmobiliario de Palma, muy alejados de los que hay en la actualidad en Suecia. La divisa sueca, la corona, tiene una buena paridad con el euro. Un euro son en estos momentos 10,298 coronas y la cotización sigue al alza por los vaivenes que afectan a moneda comunitaria.