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La Comisión de Variedades Locales ha aprobado este jueves incluir en su catálogo 155 tipos de frutales, así como tres de trigo, dos de pimientos y una de tomate.

En su segunda reunión desde que se aprobó el decreto de «Variedades locales» en 2018, la comisión de especialistas que vela por la conservación de estas variedades de las islas ha aprobado provisionalmente las incluidas en el catálogo, ha informado la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca en un comunicado.

Se ha acordado incluir en el catálogo 7 variedades de albaricoquero, 52 de almendro, 3 de trigo, 19 de cerezo, 16 de cítricos, 3 de olivo, 2 de pimientos, 9 de manzano, 12 de ciruelo, una variedad de tomate y 37 de viña.

Sobre todas ellas ya se puede consultar información en la página web varietatslocalsib.com. El catálogo de variedades locales busca inventariar y preservar el patrimonio fitogenético, mantener la agrobiodiversidad y los conocimientos tradicionales de cultivo asociados a ella.

También se ha acordado cruzar y compartir las entradas de material vegetal y la información asociada de los bancos de germoplasma de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera, tanto de las administraciones públicas como de las entidades de conservación, para aprovechar todos los recursos existentes en pro de su preservación.

La comisión ha valorado además que la autorización del olivo mallorquín e ibicenco vaya a ser realidad en breve.

Se ha reconocido la diferenciación entre el «olivo empeltre» y el mallorquín, de manera que solo falta que el Ministerio inscriba de oficio la variedad de olivo mallorquina, sinónima con la variedad payesa (ibicenca) como variedad con descripción oficialmente reconocida.
La comercialización de esta variedad ya será posible bajo el nombre de «mallorquina» en Mallorca y «pagesa» en Ibiza.

Los miembros de la comisión han aprovechado la reunión en Raixa para visitar la parcela situada junto a los jardines donde se injertarán 18 variedades locales de cítricos que actualmente se coleccionan en sa Granja, y que constituirán el banco de germoplasma de naranjos, fruto de la colaboración del Consell de Mallorca con la Dirección general de Agricultura y Ganadería.