Una maestra da clase en una centro de Palma en una imagen de archivo. | M. À. Cañellas

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La Confederació d’Associacions de Pares i Mares d’Alumnes de les Illes Balears, que aglutina a las federaciones de cada isla, suspenden las políticas del conseller de Educació, Antoni Vera, durante este primer año en el cargo. La «apuesta» por fortalecer la enseñanza concertada, el plan piloto de elección de lengua o la falta de diálogo son algunos de los puntos que se trataron el pasado 22 de julio en una asamblea, y que se dieron a conocer ayer. Aun así, valoran positivamente que estos meses Vera haya visitado todos los institutos y escuelas de Balears para conocerlos personalmente.

La confederación carga con la Conselleria por «recortar» el personal de Convivèxit, el servicio que apoya a los centros educativos para fomentar la convivencia, el bienestar emocional, el acoso, la coeducación o la diversidad sexual. «Vemos con preocupación la eliminación del personal destinado a Eivissa i Menorca, así como cambios que afectarán al buen trabajo que se ha hecho en los últimos años», explicaron.

El plan de elección de lengua, que las federaciones han rechazado desde el principio, creen que no está avalado pedagógicamente y que instrumentaliza la educación «en respuesta a pactos entre partidos». La confederación denuncia, además, que tanto el conseller de Educación, como la presidenta del Govern, Marga Prohens, «no han corroborado sus palabras» al «no consensuar» las decisiones tomadas con la comunidad educativa, siendo el plan de lengua «un ejemplo de ello».

En el comunicado también lamentan que la Mesa de diàleg amb les famílies de l’alumnat ha sido poco operativa y que en la mayoría de casos se han enterado de cambios y anuncios a través de reuniones informativas o notas de prensa. Tampoco ven bien que el decreto de escolarización se haya tramitado por vía de urgencia porque ha impedido un debate en el Consell Escolar de les Illes Balears, que incluye a todas las entidades del sector.

Celebran la ampliación de la gratuidad de la etapa 0-3 años, pero creen que no se ha previsto la falta de oferta ante el aumento de solicitudes y un «desequilibrio entre la creación de nuevas plazas de Infantil a favor de la concertada».

Las asociaciones de familias censuran completamente la reducción de las zonas escolares en Palma porque incentivas la segregación social. Además de considerar que la Mesa de Inclusión no está dando resultados más allá de la foto de su inauguración.