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Algunas empresas de rent a car han optado por curarse en salud este verano frente a la oleada de protestas contra la saturación. Tanto es así que han decidido retirar de sus vehículos los distintivos que los identifican como coches de alquiler como medida preventiva ante posibles actos vandálicos.
Aunque la temporada ha estado marcada por un clima de reivindicación ciudadana que ha tomado forma principalmente a través de movilizaciones multitudinarias, también ha habido gente que ha escogido otros canales para formalizar sus quejas, lo que incluye actos vandálicos como pintadas en hoteles e inmobiliarias o daños sobre los propios coches de alquiler, lo que se traduce en rayaduras, retrovisores arrancados o ruedas pinchadas.

De hecho, una familia de Alaró denunció hace unos meses haber sido víctima de este tipo de vandalismo, después de haber tenido que recurrir a un coche de alquiler en sustitución del suyo propio, que estaba en el taller siendo reparado. El vehículo fue objeto principalmente de rayaduras en la carrocería, desperfectos que fueron acompañados de una pegatina firmada por Associació de Veinades Enfadades (AVE) y que rezaba en inglés Tu coche de alquiler no está seguro. Cuidado con la gente local, están enfadados (en la imagen).

Con todo, desde las patronales del sector, minimizan el impacto que este tipo de episodios han podido tener esta temporada, episodios que reducen a «casos aislados». Así, el presidente de BALEVAL, Julio Nieto, señala que a pesar del «temor» que tenían en este sentido, las empresas apenas han tenido problemas de este tipo, «salvo cosas como que el cliente se encuentre las ruedas pinchadas tras aparcar en un vado». En similares términos se expresa el presidente de AEVAB, Ramon Reus, quien afirma que no tiene constancia de casos de gravedad entre sus asociados. No obstante, apunta que van a tener una reunión a final de temporada para analizar el problema de la masificación de cara a preparar un diagnóstico y un posicionamiento que sea a su vez el que se ponga sobre la mesa del Pacto por la Sostenibilidad. «Está claro que lo que no podemos es no hacer nada, pero con pedradas tampoco se arregla nada: el vandalismo no es la solución».