Catalina Barceló y Antoni Costa en la rueda de prensa.

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La población de Baleares ha crecido 15 puntos más que el parque de viviendas en los últimos 20 años. Un dato que explica y pone de relieve el gran problema estructural del Archipiélago a nivel socioeconómico y que el Govern sitúa como «el principal reto» de los próximos años. Así lo ha definido el vicepresident y conseller d'Economia i Hisenda, Antoni Costa, en la presentación del Análisis de coyuntura económica del tercer trimestre.

El informe muestra unos «datos muy positivos» en términos de crecimiento económico, con cifras al alza en todas las Islas y sectores y en múltiples planos como afiliaciones a la Seguridad Social, llegadas y gasto turístico o balanza comercial. Se constata así un incremento en el ritmo de actividad económica del 3,2 % impulsado principalmente por el sector servicios (3,7 %) pero que refleja un aumento de la ocupación en todos los sectores. Esos datos conviven, sin embargo, con otros menos positivos como el aumento de la inflación -que se sitúa por encima de la media estatal con un 2,8 % y se prevé que cierre el año con un 3,5 % por la influencia, entre otras cosas, de las fiestas navideñas- o los que marcan los «retos pendientes» de los que se acompaña el análisis del Govern, principalmente, el problema de la vivienda.

«Es la máxima preocupación de este Govern», ha señalado Costa, quien ha comparecido en compañía de la directora general de Economia i Hisenda, Catalina Barceló. En ese sentido, el vicepresident ha indicado que confía en que las políticas desplegadas por el Ejecutivo se traduzcan en un aumento del parque inmobiliario en oferta y, en consecuencia, una bajada de los precios y un aumento de las opciones de acceso a la vivienda para la clase media y trabajadora. «En pocos años habrá un aumento de la oferta de vivienda que será significativo», ha señalado para añadir que este tipo de políticas «no dan resultado a corto plazo».

Así, el aumento de la población en el periodo comprendido entre 2001 y 2023 es del 46,3 %, mientras que el número de viviendas se ha incrementado un 31,2 %, 15 puntos menos. La comparativa a nivel estatal ejemplifica la gravedad del problema balear: a pesar de que múltiples regiones del territorio estatal están inmersas en una crisis habitacional, lo cierto es que el incremento total del número de viviendas ha ido por delante del poblacional durante ese mismo periodo: un 18,7 % de crecimiento de residentes frente a un 27,9 % del parque de viviendas.

Otra comparativa relevante es la que atañe a evolución salarial y precio de la vivienda. El informe indica que los salarios crecieron un 26,8 % entre 2008 y 2023, mientras que el valor medio de las transacciones inmobiliarias lo hizo a más del doble, un 59,5 %. «Vemos que los salarios están creciendo más que en España, pero no bastan para comprar una vivienda», ha lamentado Costa.