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El beneficio neto de la banca instalada en España fue de 218.00 millones de pesetas (1.311 millones euros) en el primer trimestre, un 7'3 por ciento más que el obtenido en el mismo periodo del año 2000. Según la Asociación Española de banca (AEB), el beneficio bruto, sin embargo, sólo ha crecido un 0'5 por ciento porque el nuevo Fondo Estadístico de Coberturas para Insolvencias 'se ha llevado' 51.000 millones de pesetas. La patronal bancaria advierte en su informe económico que la desaceleración de la economía puede poner en peligro el logro del equilibrio presupuestario que el Gobierno se ha fijado para este año.

La AEB cree que las prioridades de la política económica en España deben ser asegurar el saneamiento de las finanzas públicas, seguir ampliando las reformas estructurales y evitar que la subida de la inflación se traslade a los salarios y a los márgenes empresariales.

Según el experto de la patronal, Federico Prades, ante la incertidumbre en el marco internacional y cuando la economía española afronta un momento de madurez en el ciclo de expansión iniciado en 1995, cuando se han agotado los efectos impulsores del crecimiento de la bajada de tipos o la reforma fiscal, el PIB crecerá este año un 3%, por encima de la media de la Zona Euro. La inflación terminará 2001 entre el 2'8 y 3% y se producirá una menor creación de empleo.