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El Gobierno, el PP y el PSOE instaron ayer al Gobierno vasco a prohibir la manifestación convocada para hoy en Bilbao bajo el lema «Gora (viva) Euskal Herria», mientras que el Ejecutivo autonómico indicó en un comunicado que «velará por el cumplimiento de la legalidad, como siempre lo ha hecho», sin especificar más al respecto. La Consejería de Interior del Gobierno Vasco, que dirige Javier Balza, trasladó ayer mañana a los convocantes de la manifestación el auto en el que Garzón le comunicó el jueves que es ETA «la que está, a través de varios responsables, en la convocatoria y preparación» de la manifestación prevista para el sábado en Bilbao, «a fin de que tome las medidas que considere oportunas».

Tras recibir el auto remitido por Interior, los promotores de la manifestación anunciaron que mantienen la llamada a la marcha de hoy por la tarde en Bilbao, convocada con el objeto de protestar «contra el recorte de los derechos de libertad de expresión, de reunión y de manifestación». El vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, destacó «la gravedad suma» que conllevaría, a su juicio, el incumplimiento por parte del Gobierno vasco del auto del juez Baltasar Garzón. El líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió al Gobierno vasco que respete la legalidad, lo que implica respetar las decisiones judiciales.