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El Gobierno ha decidido retrasar todavía sin fecha el Debate sobre el estado de las Autonomías, que esta previsto que se celebrara en el Senado los próximos días 19 a 23 de este mes. El motivo, la cercanía de la Conferencia de Presidentes del sábado y del debate de los Presupuestos. Y, como no podía ser de otra forma, la decisión ha provocado un nuevo enfrentamiento entre PSOE y PP. Los socialistas ven justificado el retraso, pero los populares entienden que lo que en realidad pretende el Gobierno es evitar que el presidente del Gobierno escuche en el Senado opiniones de barones socialistas sobre el Estatuto de Catalunya.

Otras citas políticas también han pesado en la decisión del Gobierno, como la presentación de los PGE el próximo día 23 o la asistencia de Zapatero a la Asamblea General de la ONU los días 15 y 16.

Alberto Caamaño, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, explicó en la primera reunión de la Junta de Portavoces del Senado los motivos del retraso. En un principio, esta cita se fijó para septiembre antes de que se decidiera retrasar la Conferencia de Presidentes hasta este mes, cuando debía haberse celebrado en julio.

El Gobierno baraja ahora como posibilidades la semana del 25 de octubre o la del 9 de noviembre. La Junta de Portavoces debatirá ambas fechas en la reunión del próximo martes. La decisión final se tomará en función de la agenda de Zapatero y de la de los presidentes autonómicos, que ya tienen en su poder la comunicación remitida por el Gobierno, dado que la celebración del Debate estaba prevista para dentro de dos semanas.

Joan Lerma, portavoz del PSOE en el Senado, aseguró que las razones que argumenta el Gobierno son suficientes para retrasar el Debate, pero el PP ha montado en cólera. Pío García-Escudero, portavoz del Grupo Popular en la Cámara Alta, aseguró que la decisión de retrasar la cita es «algo insólito, porque ha sido adoptada de forma unilateral, sin consultar a los presidentes autonómicos, y a sólo 14 días de la fecha anunciada para su celebración».