En el primer trimestre del año la desaceleración económica se ha sentido de lleno en el mercado laboral con un aumento del paro de 246.600 personas que elevó el número total de desempleados hasta 2.174.200 y la tasa de paro al 9'6 por ciento, la más alta desde 2005.
Además, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) difundida ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de parados no era tan elevado desde el tercer trimestre de 2004, cuando alcanzó 2.180.900 personas.
El incremento de parados en el primer trimestre es el mayor desde 1993, año desde el que no se había vuelto a producir un aumento de la tasa de paro superior a un punto.
El sector servicios, con 96.300 parados; la construcción, con 71.100 y la industria, con 27.800, fueron los sectores que registraron el mayor número de desempleados en el primer trimestre.
Además, en los servicios, el número de ocupados se redujo en 77.500 empleos y en la construcción en 73.200.
La actual situación económica ha dado lugar a que de los 16.572.400 hogares españoles que contabiliza la EPA, en 70.800 todos sus miembros han estado en paro durante este primer trimestre.
A través de un comunicado, CCOO denunció que la economía es incapaz de general empleo en España, y advirtió de que la inversión, tanto pública como privada, debería orientarse hacia las actividades de mayor valor añadido. Ante la grave situación por la que atraviesa el trabajo, desde el sindicato consideraron «imprescindible» que se asegure la protección por desempleo a todas las personas en paro y que la administración se ocupe de su reinserción laboral.
Por su parte, el líder de UGT, Cándido Méndez, reconoció que el aumento del empleo en el sector de la industria, así como el crecimiento de la contratación indefinida, son elementos insuficientes para contrarrestar el repunte del paro.
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