Ibarretxe recibe las felicitaciones después de que el Parlamento vasco aprobara la ley para convocar una consulta sobre el futuro de Euskadi. Foto: REUTERS

TW
0
EFE-VITORIA El Parlamento Vasco, con un voto del PCTV-EHAK, aprobó ayer la ley para convocar una consulta sobre el futuro del País Vasco el 25 de octubre, una norma que va a ser recurrida por el Gobierno y el PP, por lo que previsiblemente será suspendida. Como estaba anunciado, una de las parlamentarias del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV-EHAK) ha votado a favor del proyecto de ley de consulta, mientras que otras siete se han abstenido. La novena no ha ido por estar de baja.

El voto a favor de la parlamentaria de EHAK ha roto la igualdad a 33 del tripartito (PNV-EA-EB) más Aralar, a favor de la consulta, y del PSE-EE y el PP, en contra. La fórmula de repartir los votos del grupo ya fue utilizada por Sozialista Abertzaleak, el antiguo grupo de Basatuna en el Parlamento Vasco, para posibilitar la aprobación del denominado plan Ibarretxe hace cuatro años.

Durante el pleno de ayer no hubo novedades en los discursos, sobre los que ha planeado la decisión del Gobierno de recurrir la consulta. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, opinó que «no divide quien pregunta, sino quien prohíbe consultar». Al lehendakari le respondió por la tarde el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que garantizó que la consulta no saldrá adelante y replicó que «lo que más divide es no respetar el ordenamiento constitucional».

Advertencia
Los grupos partidarios de la consulta, PNV, EA, EB y Aralar, coincidieron en el pleno en advertir de que suspenderla «no solucionará nada». El socialista Patxi López exigió al lehendakari que no haga de Euskadi «víctima de un enemigo externo que no existe», en referencia a España, y que no se haga él mismo la víctima.

El portavoz del Partido Popular, Leopoldo Barreda, preguntó al lehendakari «cuánto ha pagado» por el voto de EHAK para aprobar el proyecto. Nekane Erauskin (PCTV-EHAK) explicó que con este único voto a favor quieren «no impedir» la aprobación de la consulta, pero también mostrar su convicción de que no podrá llevarse a cabo dentro del marco constitucional. Una vez aprobada la ley, queda convocada una consulta para el 25 de octubre.