El expresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y de Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Gerardo Díaz Ferrán (3d), junto al último director de Viajes Marsans, Iván Losada (2d), durante el juicio en la Audiencia Nacional, en el que se les acusa de apropiación indebida de 4,4 millones de euros de 4.000 clientes de esta agencia de viajes, dos meses después de que el juicio fuera suspendido por problemas auditivos del empresario. | Efe

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El expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán ha afirmado este jueves en la Audiencia Nacional que «nunca» se ha llevado dinero de los clientes de Viajes Marsans y ha acusado a la Asociación Internacional de Transporte Aereo (IATA) de «cargarse» la compañía al cortar la venta de billetes «porque le dio la gana».

Durante su declaración ante el tribunal que le juzga por apropiarse de 4,4 millones de clientes de Marsans, Díaz Ferrán ha arremetido contra IATA por su decisión de paralizar de manera «unilateral» el suministro de billetes a la compañía al ver la mala situación económica en la que se encontraba, lo que forzó a Marsans, ha dicho, a dejar de pagar a sus mayoristas en 2009.

El empresario ha defendido que la empresa «se habría podido salvar de no haberse prohibido la emisión de billetes» después que la compañía consiguiera un crédito de más de 30 millones concedido por once entidades financieras.

Con una actitud resuelta, Díaz Ferrán ha contestado a las preguntas del fiscal Daniel Campos explicando que «si no confiase en que Marsans iba a salir adelante, no habría puesto mi casa a disposición de Marsans como aval, mi mujer no estaría viviendo en una casa prestada y yo no estaría sin nada».

«Nunca me he llevado dinero de los clientes de Marsans ni he tenido intención de hacerlo», ha asegurado Díaz Ferrán, en prisión desde 2012 por el vaciamiento de Marsans y que se enfrenta a una petición fiscal de 4 años de cárcel por un delito de apropiación indebida en esta pieza separada del caso.

Además, ha alegado que la gestión de Viajes Marsans no la llevaba él, sino su socio, Gonzalo Pascual, fallecido en 2012 de un ataque al corazón y al que, ha asegurado, «los problemas de la compañía le costaron la vida».

En todo momento Díaz Ferrán ha asegurado estar al margen del pago de las nóminas del grupo con los anticipos de los clientes, que conoció por medio del sumario, y ha dicho sentirse engañado por el liquidador de la empresa Ángel de Cabo, a quien ha calificado de «gángster».

Por su parte, el que fuera administrador único de Marsans desde verano de 2012, Iván Losada, ha negado haber adoptado decisiones ejecutivas en el grupo y ha dicho no haber podido frenar el pago de las nóminas con los adelantos «al no formar parte del consejo durante este período».

La vista contra Díaz Ferrán continuará mañana ante la sección cuarta de la sala de lo penal, con la declaración por videoconferencia de varios testigos y clientes que no pudieron disfrutar los viajes que habían contratado con la compañía.