Margalida Durán denuncia la obstaculización de su labor de oposición en el Consistorio. | ARCHIVO

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La portavoz del Grupo Municipal Popular, Margalida Durán, ha acusado este jueves a la dirección de la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya) de Palma de «ocultar información a la oposición de forma continuada» sobre el caso de las falsas titulaciones, por lo que ha exigido al alcalde, Antoni Noguera, el cese de responsabilidades en Emaya de la regidora de Ecología, Neus Truyol, y de la gerente de la empresa pública, Imma Mayol.

Así se ha expresado Durán en declaraciones a los medios durante la celebración del pleno municipal. «Noguera no puede permitir que la regidora Neus Truyol siga ni un día más al frente de la empresa pública Emaya, después del oscurantismo con el que se ha gestionado la falsificación de títulos de catalán en el ente», ha aseverado la portavoz del PP.

Durán ha informado de que en la actualidad la oposición todavía no tiene acceso al expediente abierto al trabajador de la empresa y afiliado de Més al que las investigaciones apuntan como centro de la trama. «La obstaculización continua de nuestra labor nos hace pensar que la dirección de Emaya tiene algo que ocultar», ha dicho la regidora 'popular'.

Además, la edil del PP ha censurado que «no sólo han fallado todos los mecanismos de control en los procedimientos de selección de personal, sino que ha tenido que ser un trabajador de la empresa pública quien haya puesto los hechos en conocimiento de la Guardia Civil en lugar de hacerlo los responsables políticos».

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Por su parte, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma ha rechazado en la sesión destituir a la presidenta de Emaya, Neus Truyol, y a la gerente de la misma empresa municipal, Imma Mayol.

La concejala de Función Pública, Aurora Jhardi, ha defendido con vehemencia la inocencia de la presidenta Truyol y la gerente Mayol.

Por otro lado, Durán ha explicado que el PP ha votado en contra de la remunicipalización de la ORA anunciada por Cort. El PP ha recordado la «experiencia de otras ciudades, donde la internalización de este servicio ha sido un rotundo fracaso».

En cuanto a la Ordenanza de Regulación del Uso Cívico de los Espacios Públicos, Durán ha señalado que «es un instrumento esencial para la ordenación de la convivencia en Palma» pero ha considerado que el texto actual «llega muy tarde, con la temporada ya acabada, y no cumple con su función ni regula todos los aspectos necesarios».

Por ello, el PP, que ha optado por la abstención en este punto, ha presentado enmiendas al texto propuesto para «completarlo y mejorarlo» en aspectos como «la erradicación de la venta ambulante, las pintadas vandálicas y la regulación de actividades que produzcan molestias a los vecinos».