Interior de un ‘minimarket’ del centro de Palma.

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El Govern balear, junto con la Guardia Civil, ha iniciado una campaña de inspección de minimarkets de Palma ante las quejas vecinales por la venta de alcohol a altas horas de la madrugada. El objetivo de esta campaña, impulsada por la Direcció General de Comerç del Govern, es revisar las condiciones en las que se venden bebidas alcohólicas e informar a los propietarios y trabajadores para que disuadan de su consumo nocturno a pie de calle o en la entrada de los locales.

Este fenómeno se ha localizado en algunos minimarkets de Palma con un horario extensivo situados en las zonas de la calle Aragó y Passeig Marítim, especialmente después de que cierren los bares y locales de ocio nocturno. Esta práctica ha generado numerosas quejas vecinales por los ruidos e incidentes que se han producido entre sus clientes.

Denuncias

El director general de Comerç, Miquel Piñol, indicó que «pese a todos los esfuerzos del Ajuntament de Palma y de la Patrulla Verde para actuar ante las denuncias de los vecinos, el cuadro sancionador es tan laxo con estos casos que a algunos de estos establecimientos les compensar afrontar las multas y continuar con la actividad». «El objetivo de la campaña no es punitivo, sino el restaurar la convivencia vecinal y coordinarnos con las administraciones para responder a las quejas vecinales», dijo Piñol.