La portavoz del grupo municipal socialista, Rosario Sánchez, junto con el resto de regidores del partido

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Venticuatro horas después del conflicto surgido en el pleno del Ajuntament de Palma, el PSOE ha exigido este viernes la dimisión del regidor de Mobilitat, Antonio Deudero, «por los insultos proferidos», señaló la portavoz socialista, Rosario Sánchez, que añadió que «lamentamos que Palma sea noticia, incluso a nivel nacional». El estilo bronco de Isabel Díaz-Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, parece que ha aterrizado en Palma al proferirse la frase 'me gusta la fruta' como un eufemismo del insulto 'hijo de puta' que lanzó en el Congreso contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Desde entonces, se ha convertido en un insulto habitual proferido por aquellos que acuden a la calle Ferraz, sede del PSOE en Madrid, en protesta por los pactos en el Ejecutivo central.

La portavoz del PSOE en el Ajuntament de Palma advirtió que «el alcalde [Jaime Martínez] tiene que asumir responsabilidades de lo que está sucediendo con su equipo de gobierno. Ayer llevábamos a pleno la reprobación de uno de sus concejales por insultos», dijo en referencia al regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, que ha protagonizado sonados encontronazos con la oposición.

Tras la trifulca del pasado jueves en el pleno, que llevó incluso a que la oposición abandonara el salón plenario después de que Deudero se refiriera a la concejala de Més, Neus Truyol, con un 'me gusta la fruta', ahora el PSOE advierte que «la situación es más profunda y más grande», ya que aseguró que va más allá de ser un hecho puntual. «Se ha instaurado el insulto a la oposición por parte de miembros del equipo de gobierno. Por eso queremos reiterar al alcalde que asuma su responsabilidad y la autoridad que le confiere su cargo para que tome las medidas necesarias».

«El PP ha perdido el sentido de la institucionalidad de lo que está pasando. Es un insulto a la ciudadanía y contra la democracia. Lo que realmente preocupa a la ciudadanía es la vivienda, llegar a final de mes, las infraestructuras, la limpieza, el transporte público.... El pleno no se puede convertir en un reality show promovido por el equipo de gobierno», advirtió Sánchez.

Después de la salida precipitada del pleno de la izquierda, el PSOE reclamó que se convocara una junta de portavoces, que al final se llevó a cabo el jueves por la tarde después del pleno.«No podemos permitir lo que está pasando a nivel institucional, que es lo mismo que ocurre a nivel parlamentario con Marga Prohens y Antoni Costa. Es la consecuencia del 'todo vale' y la permisividad absoluta. Es una falta de respeto para lo que significa la democracia», zanjó Sánchez.

El PP de Madrid comercializa en sus sedes merchandising como tazas y camisetas con el lema 'Me gusta la fruta'. Un síntoma de la confrontación entre bloques que se repite tanto en la calle con protestas como en las sesiones plenarias.