En 2022, extrabajadores de CI Postal denunciaron la eliminación de multas por los malos tratos de la empresa y aparecieron miles de recibos por Palma. | Teresa Ayuga -

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Cinco meses sin cobrar, sin trabajo y pidiendo ayuda económica y alimentaria a las familias. Esta es la desesperada situación por la que pasan los trabajadores de CI Postal, que hasta 2022 se encargaba del reparto de las notificaciones de multas del Ajuntament de Palma y que, después de comprobarse graves irregularidades, ha llevado a miles de afectados a tener que pagar recargos por no recibirlas a tiempo. La situación ha hecho que ayer una treintena de empleados pusieran una denuncia en inspección de trabajo.

Las irregularidades de CI Postal también las están sufriendo sus empleados, que se encuentran desesperados. «Cuando se puso en marcha el nuevo contrato, en la licitación del reparto de notificaciones quedó claro que la plantilla tenía que ser subrogada. La nueva empresa que ha ganado el concurso es RD Post y ha dicho que no nos va a subrogar con las condiciones que teníamos en CI Postal», denuncia una de las personas afectadas.

Precisamente el próximo lunes empieza la actividad de RD Post, que comenzará a partir de entonces a repartir las notificaciones de las multas. «Es surrealista lo que estamos viviendo. Llevamos nueve meses esperando a que nos subroguen y ahora nos ofrecen salarios incluso por debajo del salario mínimo interprofesional y además qiueren que seamos fijos discontinuos».

Además, la nueva contrata les obliga a renunciar a la antigüedad con la que contaban en CI Postal. «Nuestras indemnizaciones se resentirían. Pero es que además aun tenemos pendientes cinco meses de sueldo que nos debe CI Postal y no nos extrañaría que se declarase en quiebra, por lo que pasaría a pagarnos Fogasa. Es decir, cobraríamos aún menos», dice la portavoz de los afectados. Mientras tanto, los empleados piden dinero a sus familias para sobrevivir, que también les ofrecen comida. «No me extrañaría que alguno haya pedido a Cáritas», señala la portavoz.

En 2022 fueron detenidos cuatro empleados de CI Postal por las irregularidades en el reparto de notificaciones de multas. Al final quedaron imputados dos y uno de ellos reconoció que tiraba las multad aunque las daba por entregadas. Miles de personas han sufrido las consecuencias y se les han reclamado recargos por los retrasos en los pagos de multas que jamás recibieron en sus domicilios.