La antigua prisión. | M. À. Cañellas

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El equipo del PP en el Ajuntament de Palma ha rescindido un contrato que firmó el Pacte para dar usos culturales a la antigua prisión. En concreto, se trata de un encargo para elaborar los estudios previos y la redacción del proyecto integral de obra y actividad del ala norte de la antigua cárcel como centro de innovación cultural y creativo.

El contrato fue adjudicado a una unión temporal de empresas en febrero de 2023 por un importe de casi 134.000 euros con IVA incluido. Al resolverlo unilateralmente, el Ajuntament deberá pagar una indemnización, así como la liquidación de los trabajos ya ejecutados; en total, casi 7.000 euros. También deberá devolver la garantía constituida por el contratista.

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Costes

Desde Cultura argumentan que se ha preferido desistir del proyecto porque implicaría asumir inversiones millonarias a la larga que no tenían «ni pies ni cabeza». La resolución de la Junta de Govern justifica esta decisión en la «necesidad de destinar el inmueble a prestaciones más urgentes»; en concreto, a la construcción de viviendas.

La antigua prisión de Palma se inauguró a finales de los años 60, y se cerró definitivamente en 1999, cuando se habilitó el nuevo centro penitenciario. En 2013 el Ajuntament adquirió los terrenos mediante una permuta, ya con la intención entonces de derribar la estructura y levantar pisos. La superficie total del solar es de 8.834 metros cuadrados, aunque el proyecto de centro artístico se centraba exclusivamente en el ala norte de las antiguas galerías de celdas, con 1.024 metros cuadrados.