El gerente de la empresa pública Serveis Ferroviaris de Mallorca
(SFM), José Antonio Santos, explicó ayer en una reunión con los
vecinos y políticos de Petra que es inviable hacer subterráneo el
paso del tren por el casco urbano del municipio, tal y como
solicitó el Ajuntament recogiendo el sentir popular, en un
propuesta aprobada por el Pleno tras conocer el anteproyecto de la
Conselleria d'Obres Públiques para recuperar la línea férrea entre
Inca y Mancor.
Santos explicó que no se puede soterrar la línea por motivos
económicos y técnicos. «Hacer subterráneo un kilómetro de vía por
el casco urbano costaría 3.500 millones de pesetas», argumentó,
añadiendo que un paso elevado también sería muy costoso, lo mismo
que desviar el tren por fuera del pueblo. El gerente de SFM quiso
tranquilizar al centenar de personas que asistieron a la charla en
ses Escoles Velles y explicó que éste es un proyecto «muy blando,
no es un tren Renfe con frecuencia cada cinco minutos, es un tren
ligero que pasará cada hora».
Santos dejó claro que el proyecto es «global» y no particular
para cada pueblo, señalando que de enterrarse, sería un agravio
para las demás poblaciones. El alcalde, Joan Font, calificó de
«barbaridad» el paso del tren por los casi 400 metros de la calle
Ample, vía atravesada por siete calles. Según Font, «el tren
afectaría a la seguridad y a la calidad de vida». Uno de aspectos
más criticados por los vecinos y el Ajuntament es que el proyecto
sólo incluye dos pasos a nivel a su paso por el casco urbano y que
se puede perjudicar la seguridad vial.
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