El alcalde de Sóller, Ramon Socias, firmó el pasado lunes la orden
cautelar de precinto de todas las obras que se ejecutan en el
complejo hotelero de Sa Talaia, en el Port. El proyecto impulsado
por Hoteles y Construcciones, con capital alemán, prevé abrir el
primer hotel de cinco estrellas de la comarca.
El acuerdo de precintar las obras fue tomado después de mantener
varios contactos entre el Consistorio y los propietarios del hotel.
De hecho, el Ajuntament pretendía que la promotora presentara
voluntariamente un proyecto de demolición parcial de una de las
infracciones detectadas por los técnicos municipales al haber
construido varios elementos sin ajustarse a las licencias otorgadas
en su día.
El batle lamentó además que mientras se intentaba alcanzar una
solución se producían nuevas infracciones, como es la instalación
de una gran grúa que había sido expresamente prohibida. Hace unos
meses, los técnicos municipales detectaron varias irregularidades e
incoaron un expediente sancionador.
En principio, el Ajuntament de Sóller «intentó ir por las
buenas» y fueron convocadas varias reuniones entre los arquitectos
municipales y los responsables técnicos de la empresa constructora
y promotora del hotel, incluidas varias visitas a las obras,
consiguiendo ambas partes llegar a un acuerdo sobre las actuaciones
que habían sido ejecutadas fuera del ordenamiento urbanístico.
Entonces se acordó que las obras prosiguieran en las zonas que se
adaptaban a la licencia, paralizando sólo las áreas «infractoras».
Ahora han sido paralizadas las obras en todo el complejo.
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