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El PSOE de Binissalem rindió la noche del pasado sábado un emotivo homenaje al ex alcalde Salvador Cànoves. El acto, en el que participaron alrededor de 250 personas, contó con la presencia del president Francesc Antich; la secretaria de los socialistas de Mallorca, Francina Armengol; los consellers Antoni Garcias y Joan Mesquida, y representantes de la mayoría de entidades y agrupaciones de Binissalem.

Con un discurso que no quiso ser de despedida, Salvador Cànoves precisó que «con 45 años todavía me queda para estar jubilado, por lo que pienso seguir dando caña». Además, hizo un especial hincapié en que el homenaje no lo merecía sólo su persona sino toda una generación y grupo de gente, «que vivió la adolescencia en el fin de la dictadura e inicio de la democracia, y que lleva años trabajando en y para Binissalem».

El que fuera alcalde de Binissalem durante 14 años recordó cómo el PSOE empezó a gobernar en el pueblo «en una época difícil, en la que había muchas familias en paro» y señaló: «En todos estos años hemos mejorado las infraestructuras y servicios de la localidad, pero también, y eso me llena de orgullo al colectivo, al pueblo».

Cànoves finalizó su discurso agradeciendo el apoyo de su mujer, «ya que sin elegirlo ni buscarlo se ha visto implicada en la política». Aprovechó la ocasión para destacar el papel de la mujer en política.