Los concejales del PP en el Ajuntament de Bunyola abandonaron la
sala de plenos el pasado lunes por la noche después de que la
alcaldesa del municipio, Maria Cabot, invitase a la regidora
popular Cristina Munar a salir de la sala porque le había tenido
que advertir en tres ocasiones de que no le faltase al respeto. En
ese momento se estaba debatiendo uno de los últimos puntos. La
alcaldesa Cabot estaba haciendo uso de la palabra y la regidora del
PP solicitó una cuestión de orden.
«No le otorgué la palabra y ella me interrumpió, le advertí una
primera vez y siguió interrumpiendo y a la tercera vez le tuve que
invitar a marcharse de la sala de plenos», explicó la alcaldesa.
Los otros tres regidores del PP decidieron abandonar la sala junto
a Munar. «Esta alcaldesa nos vulnera el derecho a participar, nos
impide consultar cualquier tipo de documento y ahora nos retira el
derecho a la palabra», manifestó el portavoz del PP, Miquel
Mateu.
Durante el pleno se aprobó también, con los votos a favor del
equipo de Gobierno (EI, PSOE, PSM) y en contra del PP, las tasas de
incineración y recogida de basuras para este año, que suben un 22%
respecto a 2002. A su vez, se acordó reclamar al Consell que el
municipio no tenga que pagar de la tasa de incineración la parte
que corresponde al transporte de basuras ni a la planta de
transferencia ya que la concesionaria lleva la basura a Son Reus y
no se hace uso de este servicio.
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