Las fuertes ráfagas de viento que en la Colònia de Sant Pere
llegaron a los 140 kilómetros por hora durante el temporal que
azotó Mallorca el pasado jueves y viernes han dejado de nuevo un
panorama desolador en esta zona costera como ya ocurriera en
noviembre de 2001. Los fuertes vientos y las olas desplazaron otra
vez el mobiliario urbano del paseo marítimo, levantaron los
adoquines y lazaron la arena y piedras del fondo marino sobre la
vía urbana. Ahora, el Ajuntament d'Artà ha solicitado a la
Demarcación de Costas que reponga los daños.
En poco más de un año, la primera línea de la Colònia ha
padecido serios desperfectos a causa de las condiciones
meteorológicas. Costas ya tuvo que invertir 300.506 euros para
arreglar los desperfectos del temporal de 2001, daños similares a
los actuales que en principio serán menos costosos.
El alcalde de Artà, Montserrat Santandreu, solicitó ayer a
Demarcación de Costas que cargue con los gastos de limpieza y las
obras de reposición del paseo «lo más pronto posible con el
objetivo de restablecer la normalidad». En la carta, dirigida al
jefe de Costas, Fernando Garrido, ebatle expone que el temporal de
viento y nieve «causó estragos en la zona costera».
Ayer por la mañana, muchos vecinos de la Colònia se acercaron
hasta el paseo para ver los destrozos del temporal. El viento
desplazó y derribó unos veinte bancos de piedra y el pavimento del
paseo levantado estaba prácticamente cubierto de piedras y arena de
la playa.
La playa también sufrió las consecuencias del viento. La arena
había desaparecido casi por completo y, en su lugar, emergían las
rocas y las piedras acumuladas.
El objetivo final es que los daños estén reparados antes del
comienzo de la temporada de verano para que la Colònia de Sant Pere
pueda mostrar su mejor imagen.
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