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El servicio de trenes que enlaza Palma con sa Pobla y Manacor, sufrió ayer numeroso retrasos que provocó el malestar entre los pasajeros. El retraso más importante se produjo en los trenes de Palma-sa Pobla, registrando tardanzas de una hora y media, aproximadamente, debido a una avería en el enlace de son Bordils, donde se encuentra el cambio de agujas que desvía a los trenes dependiendo de su destino. La avería, según informaron fuentes de Obres Públiques se produjo a causa de la rotura de un tornillo «provocado por el uso» que obligó a la paralización momentánea del servicio, incluso provocando que uno de los trenes no llegará a salir. Una vez subsanado el problema se reanudó el servicio, pero con el consiguiente retraso acumulado, obligando a una regularización horaria del servicio.

Estos retrasos también influyeron en el tren de Manacor cuyo servicio sufrió un parón de unos catorce minutos provocado por los problemas de desajuste horario del servicio de sa Pobla. En el andén de la estación de Palma se produjeron escenas de cierto nerviosismo y malestar entre los usuarios, e incluso algunos pasajeros se equivocaron de tren al salir el de dirección a Manacor en el mismo horario que el de sa Pobla, por lo que durante el trayecto el revisor iba preguntando a los pasajeros su destino y algunos de ellos tuvieron que apearse en Inca para coger el tren correcto.

También se ha producido la circunstancia de que no se cobró el viaje a los usuarios que compraban el pasaje dentro del tren.

Recordar que el pasado mes de mayo el tren de Inca sufrió un descarrilamiento en la zona de Son Bordils al pasar por el empalme donde se encuentra el cambio de agujas, lugar en el que se ha generado la reciente avería, donde los cincuenta pasajeros que viajaban en él resultaron ilesos.