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PEDRO AGUILÓ MORA
Algunos muy sorprendidos y otros no tanto. Así se mostraron ayer los portavoces de los partidos de la oposición en el Ajuntament de Campos después de que Ultima Hora desvelara que el alcalde campaner, regidor de Urbanismo y diputado del Parlament de les Illes Balears, epopular Andreu Prohens, deberá comparecer ante la Justicia después de haber sido denunciado por un presunto delito contra la ordenación del territorio tras incurrir en una supuesta infracción urbanística en las parcelas rústicas que él y su esposa poseen en el predio de Son Fullana cuando entre los años 2001 y 2002 construyeron, sobre una superficie aproximada de 10.683 metros cuadrados cuatro viviendas unifamiliares, una piscina y una caseta adyacente.

Desde UM, su portavoz municipal, Guillem Ginard, calificó la denuncia presentada contra Prohens de «muy grave, ya que no sólo se trata del alcalde de Campos, sino al mismo tiempo de su responsabilidad como regidor de Urbanismo», manifestó Ginard para añadir que el primer edil «siempre se ha reservado para él esta competencia (la de Urbanismo) sin delegarla jamás en ningún otro edil del Ajuntament». Asimismo, el portavoz de UM animó al juez instructor del caso que inicie la diligencias pertinentes, ya que «actuar como supone la denuncia constituiría un delito de prevaricación». Finalmente, Guillem Ginard agregó que «de demostrarse que Prohens prevaricó, no sería posible seguir confiando en alguien que incumple las leyes urbanísticas en beneficio propio», y recordó que «el PP, en casos de estas características, siempre ha exigido, por prudencia y ética política, la dimisión de los responsables imputados».

Por parte del PSM, su representante en el cónclave municipal de Campos, Joan Juan, advirtió de que en el próximo pleno municipal su formación política pedirá explicaciones a Andreu Prohens del presunto delito urbanístico que se le imputa ya que «como alcalde es su deber dar ejemplo». Juan añadió que, en el caso de que la Justicia demuestre que Prohens ha incurrido en un delito de prevaricación, «el alcalde debería ir pensando en poner fin a su trabajo como cargo público». «De alguna manera», concluyó Joan Juan, «la denuncia no me ha sorprendido demasiado, y es que el tema del urbanismo en Campos está un poco desmadrado», sentenció.