El departamento de Urbanismo del Consell de Mallorca será quien finalmente decida si se puede urbanizar o no el polémico sector 8 de Can Picafort, uno de los últimos pinares que queda en el núcleo urbano.
El pleno del Ajuntament aprobó el lunes por la noche por unanimidad instar al Consell de Mallorca a subsanar un posible error material cometido durante el proceso de redacción del Plan Territorial Insular. De ser corregido, se imposibilitaría la urbanización del sector 8 que prevé la normativa urbanística municipal, todavía en tramitación.
El equipo de gobierno municipal (PP-CPU) quiere demostrar con esta solicitud que no tiene ningún interés en contravenir la legalidad para urbanizar este pinar de Can Picafort. Éste se ha mantenido como urbano en la nueva normativa urbanística pese a las advertencias de los partidos de la oposición (PSOE, UM e Independents) de que contraviene la ley.
Lleno en el pleno
El urbanismo volvió a centrar el lunes por la noche el plenario ordinario municipal en el que no cabía ni un alfiler. Ante una sala abarrotada de público la oposición volvió a criticar la política municipal liderada por Martí Cifre (PP) y Bernat Amengual (CPU).
El portavoz de UM, Joan Monjo, que proponía la creación de distintas comisiones de investigación para aclarar presuntas irregularidades cometidas durante la pasada legislatura, como la contratación de las obras de dotación de servicios de la calle Miquel Ordinas o las deficiencias detectadas en la piscina cubierta municipal, volvió a denunciar lo que considera como una política de «urbanismo a la carta» en la que asegura que existe «prevaricación».
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