La finalización de la segunda fase de la variante del Port de Pollença, que se inauguró ayer, permitirá que el Ajuntament de Pollença pueda proyectar la peatonalización de la primera línea del Port. Así lo manifestó ayer el alcalde de Pollença, Joan Cerdà, durante la inauguración. Cerdà destacó la importancia de la variante, que permitirá desviar el tráfico que hasta el momento pasaba por el interior del Port.
«Esta variante mejorará el tráfico y, por tanto, la calidad de vida de los vecinos del Port de Pollença», añadió el alcalde. En cuanto a la peatonalización, Joan Cerdà manifestó que «la idea final es que la primera línea del Port sea peatonal, aunque sabemos que no es una tarea fácil».
Viabilidad
A día de hoy se está estudiando la viabilidad del proyecto y se harán pruebas piloto, ya que hay algunas cuestiones a tener en cuenta como el suministro de los comercios de la zona. Asimismo, Cerdà explicó que, aprovechando la canalización del agua que se ha llevado a cabo en la carreta de Pollença hasta el Port, se construirá un paseo peatonal en el tramo izquierdo de la carretera.
Esta segunda fase de la variante, que ha tenido un coste aproximado de 8 millones de euros, completa la primera fase, que ya se inauguró en 2004 y comprende un tramo de 3 kilómetros desde la rotonda en que se cruzan las carreteras Pollença-Port de Pollença (Ma-2200) hasta la rotonda de cruces de las carreteras de Port de Pollença-Alcúdia (Ma-2220). En esta segunda fase se han incorporado las demandas del Ajuntament de Pollença, de modo que se ha incorporado un carril para bicicletas, de color azul, que lo conecta con el existente. Además, hay una acera en todo el tramo y se ha mejorado el drenaje lateral. A lo largo del tramo, hay hasta cuatro rotondas para resolver las diferentes intersecciones.
Vial de servicio
Asimismo también se ha construido un vial de servicio, que, como señaló el director insular de carreteras, Gonzalo Aguiar, «se trata de dar el máximo de facilidades a los vecinos de la zona». Por su parte, el conseller insular d'Obres Públiques, Antoni Pascual, destacó la importancia de la variante para los vecinos del Port de Pollençá y recordó que «se trata de reivindicación histórica que finalmente es una realidad» y manifestó que «esperemos que finalmente pueda desaparecer el tráfico de la primera línea».
Finalmente, la presidenta del Consell, Francina Armengol, destacó la mejora en seguridad, tanto para los conductores como para los peatones, de la nueva infraestructura y manifestó que «la mejora de redes secundarias como ésta es el principal objetivo del Consell». Armengol señaló que «nuestra apuesta son carreteras como ésta que se alejan de macroproyectos».
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