Can Carbonell es una urbanización residencial en la que predominan los inmuebles de tipo chalet. | Antoni Martín

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El problema de los okupas se va extendiendo en Marratxí y ahora la ha tocado el turno a Can Carbonell, donde tres viviendas han sido invadidas de forma ilegal en apenas cuatro días suscitando la indignación de los vecinos de la zona.

En este caso se trata de personas que han suscrito un falso contrato de alquiler con una mafia que se dedica a esto, a okupar las viviendas en las que saben que no hay nadie, cambiar las cerraduras y realquilarlas con posterioridad.

El concejal de Participació i Seguretat Ciutadana, Antoni Mangiova (Som-Guanyem) indica que «es un problema grave, pero tenemos pocas herramientas para poder hacerle frente». Y es que para poder proceder al desalojo tiene que haber una denuncia previa del propietario y un juez tiene que decretar la orden.

Mangiova señalaba: «Lo único que podemos controlar es si se conectan de forma irregular al suministro eléctrico o a la red de agua potable. Es en lo único que el Ajuntament puede intervenir».

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Además, las personas que integran esta mafia de okupaciones ilegales son también, según el regidor, autores de pequeños robos, «robos de poca monta», señala Mangiova.

El control que ejerce esta mafia sobre los posibles objetivos es tal que muchas veces conocen que inmuebles están en situación de disponibilidad antes que nadie. De tal modo que hay vecinos que han puesto en venta su propiedad, pero no se han atrevido a poner un cartel a la vista indicándolo para evitar los problemas que conlleva tener que hacer frente a todo el proceso de desalojo.

Can Carbonell es una zona residencial, como lo es también Sant Marçal, otro de los lugares que ha sido objetivo de los okupas a lo largo de los últimos meses. Pero la zona más afectada y donde más han proliferado las invasiones ilegales de domicilios en los últimos meses es sa Cabana, dadas sus especiales características.

Está práctica también se ha extendido a otros municipios como es el caso de Inca, donde en las últimas semanas se han registrado ocupaciones ilegales incluso en zonas céntricas de la ciudad.