A principios del mes de diciembre se constituyó la mesa de ocio nocturno presidido por el alcalde Alfonso Rodríguez Badal en la sala de plenos del ayuntamiento. Esta mesa de trabajo se reunirá como mínimo una vez al mes, una periodicidad que Jesús Sánchez considera «insuficiente». | Ultima Hora

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Los empresarios turísticos y de ocio nocturno exigen que se aplique la normativa para combatir el turismo de excesos en Magaluf. Acotur y ABONE, representantes de ambos sectores, coinciden en reclamar al Ajuntament de Calvià el cumplimiento de las ordenanzas en cuanto al pub crawling, que pese a su prohibición se sigue realizando, a la competencia desleal de bares sin licencia que hacen de discoteca y a los ticketeros que venden excursiones etílicas de forma ilegal.

Cómo encarar la modernización de la oferta complementaria también pone de acuerdo a Jesús Sánchez, presidente de la Asociación Balear de Ocio Nocturno y Entretenimiento, y a Pepe Tirado, representante de la Asociación de Comerciantes Turísticos. Ambos exigen más ayudas a la administración para su reconversión en forma de incentivos fiscales, además de pedir al consistorio que cuente con su opinión. Sánchez y Tirado califican las subvenciones anunciadas por el Ajuntament de Calvià de «escasas».

Los dos portavoces esgrimen el mismo argumento también en su defensa ante las críticas de los hoteleros. «Nosotros pedimos las mismas facilidades que ellos tuvieron con la ley turística de 2012, que les permitió aumentar un 10 % sus plazas», comentan. El presidente de la Asociación Hotelera de Palmanova y Magaluf, Mauricio Carballeda, reprochó a los negocios tradicionales de la zona su ‘obsolescencia' en contraposición a la renovación de la planta hotelera.

ABONE y Acotur conforman junto a otros representantes del sector turístico la mesa de ocio nocturno que se constituyó el pasado 9 de diciembre. Un foro cuya periodicidad -se reunirá como mínimo una vez al mes, según indicó el consistorio- critica Jesús Sánchez por «insuficiente», además de haber llegado tarde. Por ello Sánchez exige «más voluntad y compromiso político» para avanzar en la solución de «una problemática que ya colea desde hace 20 años». Por su parte, Tirado aplaude la intención del consistorio y pondrá encima de esa mesa una mayor limitación de las ofertas de alcohol y una moratoria de comercios que dé aire a los ya existentes.