En el pueblo de Fornalutx se han registrado los primeros casos desde que se inició la pandemia. Algunos vecinos piensan que la causa de la propagación es la irresponsabilidad y que, posiblemente, la gran afluencia de visitantes durante los fines de semana haya influido también. | I. MEDINA

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El Ajuntament de Sóller ha advertido que en los últimos siete días los casos de COVID-19 en el municipio se han incrementado de forma alarmante. La concejala de Sanidad, Catalina Pomar, compareció ayer junto al alcalde, Carlos Simarro, para analizar los últimos datos sobre la pandemia en Sóller que calificó de «brotes descontrolados».

Si hace una semana el Govern notificaba 77 positivos, los últimos datos han revelado la existencia de 121 casos positivos, 44 nuevos contagios en una semana. El centro de Salud de Sóller ha multiplicado por seis la media diaria de PCR, pasando de 4 a 25.

Ante esta situación, Pomar avisa que en Sóller los brotes están «descontrolados» instando a los vecinos a seguir cumpliendo y a extremar las normas sanitarias» y apelando al ‘seny'. Según la concejala, «el anterior brote que hubo en Sóller estaba más controlado porque los casos se concentraban en la residencia pero ahora aumentan día a día», pidiendo a los ciudadanos «prudencia». Por su parte el alcalde, Carlos Simarro, ha comentado que «falta poco para que llegue la vacuna y ganar la carrera».

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Ahora, el municipio se encuentra en la decimoquinta posición de pueblos de la Isla con más casos de COVID-19 por cien mil habitantes. La incidencia acumulada en los primeros 15 días de noviembre fue de 22 casos y durante estas dos últimas semanas ha aumentado hasta 116 casos. De momento no se contempla un confinamiento. Hace siete días, los casos comenzaron a subir en Sóller con 18 nuevas PCR positivas, frente a entre cero y cuatro de una semana antes. Pomar destacó la «buena organización» del centro de salud.

Fornalutx acuerda el cierre de bares a partir de las 17.00 horas

El alcalde de Fornalutx, Xisco Marroig, y el teniente de alcalde, Felipe Reynés, se reunieron con bares y restaurantes para consensuar medidas más restrictivas que las marcadas por el Govern. Los bares aplicarán la limitación de aforo y cerrarán a las 17.00 horas.