Comité de Crisis del Ayuntamiento de Calvià tras el ciberataque de Ransomware. | Ayuntamiento de Calvià

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El gabinete de crisis continuaba este lunes en marcha en el Ayuntamiento de Calvià tras el ciberataque perpetrado la madrugada del sábado y que puede comprometer datos sensibles del municipio. El alcalde de la localidad, Juan Antonio Amengual, confirmó que los hackers han solicitado diez millones de euros para desencriptar la red informática del consistorio, un extremo que Amengual no piensa aceptar. «No podemos ni queremos pagar un chantaje a unos delincuentes», sentenció contundente.

Las alarmas saltaron el sábado a las dos de la madrugada y este lunes el departamento de informática del propio ayuntamiento junto a una empresa externa y expertos informáticos del Govern y del Consell de Mallorca trabajaban en las labores de contención del ciberataque de Ransomware perpetrado por el grupo organizado de hackers Lockbit. El objetivo es recuperar la normalidad lo más rápido posible, avanzó este lunes por la mañana el primer edil, que recalcó que los ciudadanos de Calvià pueden mantener el contacto con el Ajuntament vía telemática a través del registro de la Administración General del Estado.

Además, los plazos administrativos como presentación de alegaciones o instancias, entre otros trámites on-line, quedan suspendidos hasta el 31 de enero. «Nos hemos marcado esta fecha para poder dar continuidad, aunque debo señalar que los ciudadanos también pueden dirigirse presencialmente a las dependencias municipales», añadió. A su vez recordaba que si bien desconocen el alcance en estos momentos se prioriza poder atender los servicios esenciales para la ciudadanía como puede ser la policía.

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Amengual reconoció que todavía desconocen el alcance del secuestro de datos. «No hemos podido valorar el alcance del ataque ni sabemos qué tipo de información tienen retenida» apuntó mientras recordaba que ahora el objetivo es «crear una nueva red nueva y segura». Precisamente los trabajadores del Ajuntament recibieron instrucciones sobre cómo actuar desde sus puestos de trabajo. Además de cambiar todas las contraseñas, quedó prohibido conectar los ordenadores a la red.

Estos tuvieron que trabajar de manera telemática o bien través de ordenadores portátiles, para garantizar la seguridad informática. «No queremos alarmar a la ciudadanía, aunque no tenemos ni idea de qué información está comprometida», añadía Amengual.

No es la primera vez que un ayuntamiento es objetivo de un ataque informático de estas características. El pasado mes de septiembre el ayuntamiento de Sevilla también fue objeto de un ciberataque. En aquella ocasión se solicitaban cinco millones de euros para su rescate, la mitad de los que piden ahora al consistorio calvianer. Juan Antonio Amengual explicó que los mismos que han perpetrado el ataque en Calvià también actuaron contra Movistar y el Hospital Clínic de Barcelona.

La denuncia presentada este lunes ante el grupo de delitos telemáticos de la Guardia Civil incluye el análisis forense preliminar sobre la situación que se han encontrado los servicios informáticos del consistorio y que pretender ser lo más exhaustivo posible para poder ofrecer el máximo número de detalles. Juan Antonio Amengual también explicó a este periódico que el ayuntamiento también ha puesto los hechos en conocimiento del Centro Criptológico Nacional (CNN-CERT) para estudiar el caso.