Los alcaldes de la Mancomunitat aprobaron una moción de rechazo a la macrogranja de Sineu.

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La Mancomunitat del Pla hace piña contra el proyecto de la macrogranja de Sineu. Así, ayer, durante la sesión plenaria de la entidad celebrada en el Ajuntament de Llubí, se aprobó una moción de rechazo a este proyecto. De esta manera, los catorce municipios del Pla hacen frente común ante esta problemática.

Desde la Mancomunitat señalaron que son conscientes «que el proyecto presentado por Avícola Son Perot genera serias preocupaciones entre la ciudadanía de todos los municipios que se verían afectados de alguna manera, todos de la comarca del Pla». Además, apuntan que «la necesidad de construir un estercolero, fosas para aguas sucias y otras fosas adicionales plantea riesgos ambientales significativos, además que la producción de 30.625 toneladas de basura anual puede suponer un grave problema de gestión de residuos y contaminación».

En este sentido, cabe recordar que el proyecto contempla la instalación de una infraestructura destinada a 739.400 gallinas de las cuales, 242.520 serán de recría y 496.880 adultas, distribuidas en nuevas edificaciones, además de otras instalaciones complementarias.

Respecto al consumo de recursos naturales, donde la Mancomunitat tiene competencias, se recuerda que la comarca está en situación de prealerta por sequía, además de la escasez de agua que ya presenta de por sí la comarca. Así, señalan que el consumo de agua previsto de más de 60.000 metros cúbicos al año acontece «una preocupación grave, teniendo en cuenta que la Mancomunitat ha limitado recientemente el consumo de agua a sus habitantes y que existe una gran presión sobre los recursos hídricos».

Finalmente, en en cuanto al impacto de esta industria en la calidad de vida de los residentes, y también de visitantes, destacan que «la proximidad a los cascos urbanos de Sineu y de Maria de la Salut puede afectar negativamente la calidad de vida de los residentes a causa de posibles olores, revuelos y aumento del tráfico pesado».

La Mancomunitat ya presentó alegaciones dentro del plazo y en la forma oportuna al proyecto durante la exposición pública de éste para que se realice un estudio más concreto de la afección del proyecto a los acuíferos y como se pueden ver afectados los suministros locales y las masas de agua en la comarca.