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EFE-LONDRES Los antidepresivos de nueva generación no funcionan salvo en los casos más graves y en la mayoría de los pacientes sólo tienen un efecto de placebo. Esa es la conclusión de un estudio llevado a cabo por científicos del Reino Unido, Estados Unidos y Canadá que examinaron todos los datos existentes sobre ese tipo de substancias, incluidos los de pruebas clínicas que los laboratorios no publicaron en su día.


Los fabricantes de Prozac y Seroxat, dos de los antidepresivos más vendidos en todo el mundo, expresaron, sin embargo, su desacuerdo con los resultados.

Así, un portavoz de los laboratorios británicos GlaxoSmitKline, que fabrica el Seroxat, explicó que el estudio había tenido en cuenta sólo un segmento pequeño de los datos disponibles, mientras que Eli Lilly, fabricante de Prozac, dijo que la experiencia ha demostrado su eficacia.

Los científicos compararon, sin embargo, el efecto en pacientes a los que se administró alguno de esos antidepresivos con el obtenido en otros que recibieron tan sólo un placebo y descubrieron que la mejoría era muy similar en ambos grupos.