Folklore internacional sin límites ni fronteras

Allí, una decena de grupos tradicionales de varias regiones de Bulgaria pero también de China, Bolivia, Ecuador, Reino Unido o Rusia dieron a conocer su música, trajes regionales y bailes al público presente. El principal atractivo del espectáculo fueron los vestidos típicos de cada país, que destacaron por su extremada elaboración, tonos coloridos y originalidad.

En total más de 200 bailarines participaron en el evento, presentado por Radostina Spasova y Luis Inglés, en el cual no faltó un puesto de venta en el que se podían adquirir comida, bebida y un surtido de souvenirs y recuerdos de Mallorca.

Cuando le preguntamos a Vanesa Doseva qué caracteriza el folklore de su país, la promotora cultural responde sin dudarlo: «la energía. La energía es algo que nosotros llevamos en el corazón y solo lo sabemos expresar de esta manera. Nos identifica como nación y también representa nuestro carácter, nuestro día a día o incluso nuestra vida familiar. El folklore búlgaro tiene trajes muy coloridos pero distintos entre si dependiendo de la región. Los hay que son alegres y coloridos pero otros tienen tonos más tristes, los hay de todo tipo porque hemos tenido momentos buenos y otros no tan buenos». La dinamizadora cultural añadió que «este año hay bailarines que han venido expresamente desde Bulgaria para participar en este encuentro».

La de ayer fue la tercera edición en la que se celebra este encuentro internacional. La primera vez que se llevó a cabo fue en 2019 pero tuvo que detenerse durante tres años a causa de la pandemia de COVID-19 hasta que el año pasado se pudo reanudar esta iniciativa y celebrar una exitosa segunda edición.