Las VPN llevan años y años en el mercado, pero eran habitualmente usadas solo por empresas que querían una capa adicional de protección en sus conexiones. Ahora, en los últimos años, la búsqueda de mayor privacidad y seguridad en Internet ha hecho que millones de ciudadanos del mundo se intenten informar sobre ellas.
¿Qué son las VPN?
Las Virtual Private Network redirigen tu tráfico de red a un servidor privado que oculta lo que buscas y lo que descargas a tu proveedor de red. La VPN simula que estás físicamente en otro lugar del mundo, lo que, además de protegerte mientras navegas, te permite acceder a sitios web y servicios restringidos geográficamente, además de otras muchas posibilidades que comentaremos a continuación. Sabiendo esto, quizá te interese información acerca de una VPN para Perú.
¿Para qué sirve una VPN?
Uno de los usos más comunes en los últimos tiempos ha sido proteger la conexión entre los trabajadores que no podían salir de casa y la empresa donde trabajaban. El teletrabajo, al requerir, a veces, que trabajador y empresa estén conectados para poder manipular archivos y otras tareas, no puede olvidar su seguridad a la ligera. Para garantizar que no existen filtraciones o hackers que se inmiscuyen en la red sin permiso, la VPN facilita y protege esa conexión.
Como hemos dicho antes, las VPN también sirven para saltarnos censuras y bloqueos geográficos que nos impiden ver contenidos de otros países o acceder a páginas web que no están disponibles en nuestro país, como algunas películas de Netflix. Supuestamente, Internet es un lugar libre donde todo el mundo es bienvenido, por lo que nadie debería decirte dónde puedes entrar.
Además de estos usos relacionados con el ocio, las VPN sirven para poner un escudo más entre nosotros y las amenazas de Internet. Protegen nuestra información al descargar archivos mediante P2P, o cifran los paquetes que se envían sin cifrar por redes Wi-Fi públicas apara evitar que un hacker que esté conectado a la misma red pueda hacerse con nuestros datos y robarnos las cuentas.
No obstante, las VPN no son perfectas. Por ejemplo, al usar una VPN, la velocidad de nuestra conexión baja notablemente, pero no hasta un punto que la haga incómoda de utilizar. Además, las mejores VPN no son gratuitas, aunque ningún producto pulido y de buena calidad lo es hoy en día, así que esto no es problema, y los precios al mes no son muy altos.
En resumen, las VPN te permiten acceder a lugares de Internet que están bloqueados en tu país, protegen tus datos y permiten a las empresas crear un entorno de trabajo seguro para sus teletrabajadores. Incluso teniendo en cuenta sus desventajas, que son pocas, merece la pena utilizarlas si valoramos nuestra privacidad y seguridad al navegar.