El 34 % de adolescentes de Baleares hace un uso excesivo de Internet y redes

Este informe recoge las opiniones de más de 50.000 estudiantes de ESO de 265 centros de toda España, 3.000 de ellos en Baleares. La participación ha sido voluntaria y confidencial y los datos fueron recogidos entre noviembre de 2020 y marzo de 2021 a través de un cuestionario online en las mismas aulas. En el caso de Baleares han participado 14 centros con una muestra de 2.982 estudiantes de entre 11 y 18 años.

Entre los principales datos que muestra el estudio destaca que el 90,4 % de los jóvenes encuestados se conecta a Internet todos o casi todos los días y la inmensa mayoría, el 96,9 %, afirma que la red les hace sentir alegría, mientras el 81,6 % y 80,3 % experimentan relajación y diversión, respectivamente. El 24,4 % de los encuestados asegura tener discusiones con sus padres por culpa de la tecnología al menos una vez por semana y sólo el 31,5 % de los alumnos del estudio tienen límites o normas sobre uso de internet o pantallas por parte de los padres.

Por su parte, el 47 % de los encuestados asegura haber recibido alguna vez mensajes de contenido erótico-sexual y el 12,1 % alguna propuesta sexual por parte de un adulto. Por otra parte, llama la atención el hecho de que el 34 % de los adolescentes de Balears hace un uso excesivo de Internet y las redes sociales. También, que según el estudio 1.500 estudiantes de las Islas han jugado o apostado online alguna vez en su vida.

En su intervención, el conseller March ha valorado positivamente la elaboración del informe 'Impacto de la Tecnología en la Adolescencia. Relaciones, Riesgos y Oportunidades', porque, según ha dicho, «es bueno hacer un diagnóstico del impacto de la tecnología en los adolescentes para lograr una convivencia mejor».

«Estamos en una sociedad de digitalización progresiva», ha dicho el conseller, quien ha apuntado que, por este motivo, «y a pesar de que no hay que olvidar que una educación sin presencialidad es casi imposible», es importante «dar una respuesta adecuada y eficaz al aprendizaje en línea». «Tenemos muchos retos por delante y colaborar con este estudio de Unicef es muy importante para poder afrontarlos», ha asegurado.

En este sentido, ha considerado como «un elemento clave» mejorar la competencia digital. «Se ha pasado de una digitalización casi inexistente en centros educativos a dotar estos de infraestructuras adecuadas y a trabajarse la competencia digital a tres niveles, que son el profesorado, el alumnado y las familias, con el fin de lograr un buen uso de las tecnologías, que ya están aquí y hay que saber cómo utilizarlas». Pues, «la tecnología no es un peligro si las sabemos utilizar», ha enfatizado.

Finalmente, March ha considerado «absurdo» limitar el debate de la tecnología al ámbito educativo porque, ha asegurado, «es un reto y una oportunidad para la sociedad en su conjunto». «Formar y capacitar en digitalización permite una cohesión social en vez de crear nuevos problemas y peligros. Por este motivo, los derechos de los menores y la digitalización son los puntales de los nuevos currículos que se están poniendo en marcha y que a día de hoy son los que hacen falta», ha sentenciado.

Por su parte, la presidenta de Unicef Comité Baleares, Mercedes del Pozo, ha dicho que «el informe demuestra que las tecnologías y el uso que la adolescencia hace de ellas puede suponer efectos negativos derivados de la falta de acompañamiento, las horas de exposición o los contenidos». Sin embargo, ha matizado, «no sólo tiene efectos negativos». «El reto consiste, seguramente, en cómo integrar un uso adecuado y prevenir situaciones de riesgo», ha destacado.

El informe recoge recomendaciones por parte de Unicef España para fomentar una buena higiene digital, entre ellas la necesidad de que las familias cuenten con herramientas y soporte para poder ejercer su labor educativa y de acompañamiento; así como promover la importancia del sistema educativo como ámbito clave para adquirir las pautas y herramientas necesarias para manejarse en Internet. Otras de las recomendaciones de Unicef España son que los propios adolescentes reciban la información necesaria tanto para poder comprender los riesgos como para denunciar situaciones de abuso y contar con políticas más contundentes por parte de las instituciones para la protección de menores y su imagen en la red.

También, que la industria tecnológica garantice la protección de los adolescentes a través de, por ejemplo, recomendaciones claras de uso y privacidad. En el plazo de 2021 a 2024 se invertirán más de siete millones de euros de los fondos MRR para mejorar la competencia digital y la formación de 14.476 docentes de los 456 centros educativos de Baleares. La inversión de los fondos MRR contribuirán a consolidar la línea ya iniciada por parte de la Conselleria de mejora digital de los centros educativos.

Por un lado el esfuerzo que se ha realizado en los últimos años para garantizar la conectividad de todos los centros educativos públicos de Baleares con banda ancha ultrarrápida de hasta 1 GB y cobertura Wifi actualizada. Y por otro, la puesta en marcha del CEP Ibsteam que coordina toda la formación en competencia digital de los centros educativos de las Islas. Por otra parte, también se ha previsto destinar 18.896.352 euros de fondos ministeriales a la adquisición de 5.000 aulas digitales con las que se prevé cubrir las necesidades de los centros educativos públicos de Baleares.

Cabe destacar que estos fondos incorporan también aulas digitales específicas adaptadas a las peculiaridades de los centros. Así también se contarán con aulas de taller de radio, de taller de producción audiovisual o de diseño gráfico, entre otros. Las aulas digitales vendrán acompañadas de una formación específica por capacitación y soporte dotada con 436.089 euros que se añaden a los 18,9 millones anteriores.