TW
2

Durante estos días se están publicando informaciones sobre las prioridades del nuevo Govern de Marga Prohens. A falta de concretar cómo gobernar en minoría, Prohens anuncia la eliminación de los injustos impuestos de sucesiones y donaciones. Pero las primeras semanas de gobierno son aquellas durante las cuales hay que ejecutar las prioridades de la legislatura, que es lo que ha hecho la izquierda cada vez que ha gobernado.

En mi opinión hay dos asuntos urgentes que deben servir para volver a prestigiar las instituciones. Una de ellas es suprimir la Oficina Anticorrupción creada por la izquierda, que ha sido un órgano ejecutor del propio Govern que ha mirado para otro lado cuando los investigados eran dirigentes progresistas (recuerden el asunto de los altos cargos que se saltaron el orden de la vacunación) y que ha actuado con mano dura cuando se trataba de dirigentes de la oposición sin que pudiesen ni siquiera explicar su postura o defenderse. No sé el gasto que supone por año este organismo, pero es totalmente prescindible. Si hay irregularidades económicas ya está la Sindicatura de Comptes para denunciarlas. Si se detectan ilegalidades en la gestión deben denunciarse a la Fiscalía, que ha dado buena muestra durante años de cómo se las gasta, sobre todo con ciertos asuntos. Por lo tanto, liquiden este organismo partidista y ahorren dinero a los ciudadanos. Dediquen el presupuesto a ayudar a entidades como Cáritas, que no dan abasto con las familias que no llegan a fin de mes por la inflación. Y que los funcionarios sean destinados a otros departamentos.

Otro asunto que debe aclararse con urgencia es lo ocurrido con las menores tuteladas que fueron prostituidas. Los ciudadanos no se tragan que la culpa sea de la sociedad, de los policías o de los fiscales por no actuar. Debe conocerse, y en sede parlamentaria, cómo empezó todo, qué se hizo al respecto y que los responsables de cada centro expliquen los fallos que se han cometido. No más comisiones de expertos para tapar la verdad, que es lo que hizo Catalina Cladera en el Consell esta pasada legislatura. No más responsabilizar a la sociedad de algo que está en manos de política. PP y Vox tienen mayoría suficiente para crear esta comisión de investigación en los próximos meses, caiga quien caiga. Recuerden que la opacidad de las instituciones de Balears durante estos cuatro años fue incluso reprobada por la Unión Europea. Este escándalo no puede quedar sin respuestas y no se soluciona con varios tuits. Si hay que recuperar la confianza en las instituciones, empiecen por lo básico.