TW
0

La presentación el lunes del libro sobre ‘La Paca' de Pep Matas me hizo recordar y revivir las escuelas periodísticas de Mallorca. La Posguerra apartó a muchos intelectuales de salón de las redacciones y dio paso a periodistas que salían a la calle para encontrar historias que no interesaran a los censores. La década de 1960 fue el punto de partida de una rivalidad periodística que creó escuelas en las redacciones de Baleares, Ultima Hora y Diario de Mallorca. Había diferentes formas de praticar el oficio y también de interpretar la realidad cotidiana.

El periódico que contaba con más recursos y la mejor plantilla era el Baleares del Movimiento. Periodistas como Francisco Javier Jiménez, Joan Bonet, Feijóo, Rat, Jesús Cor… o fotógrafos como Juanet, disponible a cualquier hora del día o de la noche, imprimieron un sello de calidad a la publicación. Bohemios, vocacionales y sin un duro en los bolsillos, aquellos genios transmitieron el oficio a las nuevas generaciones. Pedro Serra, uno de sus alumnos más aventajados, insufló aquel espíritu a la redacción de Ultima Hora cuando sustituyó en la dirección a Pepín Tous, otro gran director entusiasta del periodismo popular y de los grandes reportajes de Pau Llull, Planas Sanmartí y Antoni Serra primero, y de Santiago Miró, Toni Torres y Tomás Monserrat después. Nada es casual, como este mismo periódico, que es la herencia de todos estos genios, y de tantos más; o el mismo libro de Pep Matas, fiel testimonio de dos escuelas que supieron fusionarse. Lo importante es transmitir ahora tanta pasión a los nuevos periodistas de la era digital y del teléfono móvil. Y no es fácil.