El sultán Al Jaber se ha hecho famoso. Además de presidir la Cumbre del Clima en Dubái, está al frente de una compañía petrolera. Es lógico que defienda su chiringuito, ¿no? Lo que me hace pensar que todos en esa reunión, y fuera de ella, defienden su chiringuito. Su modo de vida, vaya. Por eso dudo muchísimo que las voces que con tanta urgencia nos invitan a cambiar de modelo sean precisamente hermanitas de la caridad. La defensa de la vida y la supervivencia del planeta me parece muy loable; soy la primera amiga de la naturaleza. Pero le tengo cierto cariño al confort, esa calefacción en invierno, ese aire acondicionado en verano, los largos viajes a lugares lejanos, el plato de comida caliente tres veces al día en la mesa… ya sabes, la forma de vida del mundo desarrollado. También tengo claro que eso, mis intereses, mis querencias, le importan un bledo a quienes dirigen el cotarro.
Engañifa
Palma11/12/23 0:29
También en Opinión
- Jaque a la okupación de viviendas: los desahucios pasarán de ejecutarse en años a semanas
- La nueva (y molesta) moda que se extiende por Mallorca
- Bombogénesis: ¿qué es y cómo afectará a Mallorca?
- El profesor condenado por acoso se reincorpora y los padres de los alumnos estallan: «Pone en riesgo a nuestros hijos»
- Los okupas detenidos en Palma intentaron tirar por la ventana a los amigos de la dueña del piso
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
El capitalisme no té moral, tot és negoci, en tots els sentits va primer el negoci que el futur.